miércoles, 23 de enero de 2013

MAM.- DICTADURA DEL PROLETARIADO - Presidente Mao Tse-Tung

SOBRE EL SOCIALISMO Y LA DICTADURA DEL PROLETARIADO
(3 – Presidente Mao Tse-tung)
El Presidente Mao Tse- tung en su elevación del marxismo a una nueva, tercera y superior etapa ha desarrollado extraordinariamente el socialismo científico como teoría y practica de la revolución, principalmente con su inmarcesible desarrollo de la gran revolución cultural proletaria. Así, el Presidente Mao con la revolución cultural proletaria, como continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado, profundizo y desarrollo grandiosamente la cuestión fundamental del socialismo y la dictadura del proletariado; estableció la forma como desarrollar la revolución, en las condiciones de la sociedad socialista y bajo el Estado de dictadura del proletariado, para proseguir la marcha inexorable hacia el comunismo.
Veamos puntos y situaciones que llevaron a esta conclusión trascendente. Sobre la revolución, en “Sobre la camarilla contrarrevolucionaria de Ju Feng”, el Presidente Mao escribió:
 
“Excepto la revolución que sustituyo a la comunidad primitiva por la esclavitud, es decir, que reemplazó un sistema en el que no existía la explotación por otro de explotación, todas las demás revoluciones del pasado concluyeron en el reemplazo de un sistema de explotación por otro. Para ellas no era necesario ni posible aplastar definitivamente la contrarrevolución. Sólo nuestra revolución, la revolución de las masas populares dirigida por el proletariado y el Partido Comunista, tiene como meta la eliminación definitiva de todos los sistemas de explotación y todas las clases”.
Y sobre la “regla universal” de primero tomar el Poder para transformar la sociedad:

“Desde el punto de vista de la historia mundial, la revolución burguesa y el establecimiento de Estados burgueses tuvieron lugar antes y no luego de la revolución industrial. Aquí también la superestructura tuvo que ser transformada primero y el aparato de Estado puesto en su lugar antes que fuesen propagadas las ideas que permitían adquirir el poder real. Resulto de ello un sacudimiento profundo de las relaciones de producción. Cuando las nuevas relaciones de producción fueron bien establecidas, abrieron la vía al desarrollo de las fuerzas productivas. Pero un gran desarrollo de las fuerzas productivas proviene siempre de la transformación de las relaciones de producción. Tomemos el ejemplo de la historia del desarrollo del capitalismo. Al comienzo no hubo sino: un simple reagrupamiento de actividades; luego se crearon fábricas y talleres artesanales. En este estadio se establecieron las relaciones de producción capitalistas, pero los talleres artesanales no eran todavía la producción mecanizada. Las relaciones de producción capitalistas hicieron nacer necesidades de transformaciones técnicas, creando así las condiciones para la utilización de máquinas. En Inglaterra, la revolución industrial (fines del siglo XVIII- comienzos del siglo XIX) se produce luego de la revolución burguesa (que tuvo lugar después del siglo XVII). Igualmente en Alemania, Francia, Estados Unidos y Japón, el gran desarrollo industrial capitalista no comenzó si no luego de la transformación de la superestructura y de las relaciones de producción, transformación cuya forma varió según los países.
Primeramente crear opinión pública y apoderarse del poder político. Resolver el problema de los sistemas de propiedad luego, para llegar por fin a un gran desarrollo de las fuerzas productivas, he aquí la regla universal. Sobre tal punto, la revolución proletaria y la revolución burguesa se parecen fundamentalmente a pesar de ciertas diferencias. (Las relaciones de producción socialistas, por ejemplo, no existían antes de la revolución proletaria, mientras que las relaciones de producción capitalistas comenzaron a desarrollarse en la sociedad feudal.” (“Notas de lectura sobre el ‘Manual de Economía Política’ de la Unión Soviética”).

Así como sobre la necesidad de demoler la vieja superestructura para abolir las antiguas relaciones de producción:

“La historia de todas las revoluciones ha probado que no era necesario tener previamente desarrolladas las fuerzas productivas en su plenitud para poder transformar las relaciones de producción envejecidas. La revolución China comenzó por la propagación del marxismo. Gracias a esta propagación, nació una nueva opinión pública, facilitando así la revolución. Es necesario antes que nada demoler la antigua superestructura por la revolución para que las antiguas relaciones de producción puedan ser abolidas. Es después de la eliminación de éstas que se pueden crear nuevas relaciones de producción, abriendo una vía al desarrollo de las fuerzas productivas de la nueva sociedad. Solamente luego se puede desarrollar una gran revolución tecnológica, para desarrollar vigorosamente las fuerzas productivas, continuando al mismo tiempo la transformación de las relaciones de producción y las ideologías. El Manual no habla de las premisas materiales y no aborda más que raramente la superestructura.
Es decir el Estado de clase, la filosofía de clase y las ciencias de clase. La ciencia económica tiene por principal objeto de estudio las relaciones de producción. Pero es difícil separar la economía política y la concepción materialista de la historia. Es difícil explicar claramente los problemas relativos a la base económica y a las relaciones de producción sin tener en cuenta los problemas concernientes a la superestructura.” (Ibídem).

En cuanto a cómo surgió la Nueva China:

“Nuestra República Popular no fue formada de la noche a la mañana, sino que se desarrolló poco a poco partiendo de las bases revolucionarias. Algunas personalidades demócratas se han templado también en la lucha, en mayor o menor grado, y sufrieron junto a nosotros tribulaciones y penas. Algunos intelectuales se templaron en la lucha contra el imperialismo y las fuerzas reaccionarias, y muchos de ellos pasaron, después de la Liberación, por un proceso de transformación ideológica encauzada a trazar una clara distinción entre nosotros y el enemigo. La consolidación de nuestro Estado se debe, además, al hecho de que las medidas económicas que adoptamos son básicamente acertadas, a que la vida del pueblo es segura y mejora gradualmente, a que nuestra política respecto a la burguesía nacional y otras clases es asimismo correcta, etc.” (“Sobre el tratamiento correcto de las contradicciones en el seno del pueblo”).

Y en cuanto a la dictadura y sus funciones:

“Nuestro Estado es un Estado de dictadura democrática popular, dirigido por la clase obrera y basado en la alianza obrero-campesina. ¿Cuáles son las funciones de esta dictadura? Su primera función es reprimir dentro del país a las clases y elementos reaccionarios y a los explotadores que oponen resistencia a la revolución socialista, reprimir a los que sabotean la edificación socialista, es decir, resolver las contradicciones entre nosotros y el enemigo dentro del país. En esta esfera de nuestra dictadura están incluidas, por ejemplo, la detención y la condena a ciertos contrarrevolucionarios y, durante un determinado tiempo, la privación de derechos electorales y libertad de palabra a los terratenientes y los elementos de la burguesía burocrática. Para mantener el orden social y defender los intereses de las grandes masas populares, es igualmente necesario ejercer la dictadura sobre los ladrones, estafadores, asesinos, incendiarios, las bandas de malhechores y los diversos elementos perniciosos que violan seriamente el orden social. La dictadura tiene además otra función: defender nuestro país contra las actividades subversivas y la posible agresión de los enemigos exteriores. Cuando surge tal situación, la dictadura tiene a su cargo la tarea de resolver las contradicciones entre nosotros y el enemigo del exterior. El objetivo de la dictadura consiste en proteger a todo el pueblo para que pueda trabajar en paz y transformar a China, mediante la construcción, en un país socialista con una industria, una agricultura, una ciencia y una cultura moderna. ¿Quiénes ejercen la dictadura? Naturalmente, la clase obrera y el pueblo entero dirigido por ésta. La dictadura no se aplica dentro del pueblo. El pueblo no puede ejercer la dictadura sobre si mismo, ni una parte del pueblo puede oprimir a otra. Los que, en el seno del pueblo, violan las leyes, también deben ser castigados con arreglo a la ley, pero entre esto y la dictadura que reprime a los enemigos del pueblo existe una diferencia de principios. Dentro del pueblo se practica el centralismo democrático.” (Ibídem).

Y en lo referente a libertad y democracia:

“En realidad, en el mundo sólo hay libertad y democracia concretas, y no existen libertad ni democracia abstractas. En una sociedad donde existe lucha de clases, si hay libertad para que las clases explotadoras exploten al pueblo trabajador, no hay libertad para que éste no sea explotado; si hay democracia para la burguesía, no la hay para el proletariado y el resto del pueblo trabajador. En algunos países capitalistas también se permite la existencia legal de los Partidos Comunistas, pero únicamente en la medida en que esto no pone en peligro los intereses fundamentales de la burguesía; no esta permitida mas allá de ese limite. Los que piden libertad y democracia en abstracto creen que la democracia es un fin y no un medio. A veces la democracia parece un fin, pero en realidad es solo un medio. El marxismo nos enseña que la democracia forma parte de la superestructura y pertenece a la categoría de la política. Esto significa que, en fin de cuentas, la democracia sirve a la base económica. Lo mismo ocurre con la libertad. Tanto la democracia como la libertad son relativas y no absolutas, han surgido y se desarrollan en el curso de la historia. En el seno del pueblo, la democracia es correlativa con el centralismo, y la libertad, con la disciplina. Son dos aspectos opuestos de un todo único, contradictorios y a la vez unidos. No debemos recalcar unilateralmente uno de ellos negando el otro. En el seno del pueblo, no se puede prescindir de la libertad, tampoco se puede excluir la disciplina; no se puede prescindir de la democracia, tampoco se puede excluir el centralismo. Tal unidad de democracia y centralismo, de libertad y disciplina, constituye nuestro centralismo democrático. Bajo este sistema, el pueblo disfruta de una democracia y una libertad amplia, pero al mismo tiempo debe mantenerse dentro de los límites de la disciplina socialista. Esta verdad la comprenden bien las grandes masas populares.” (Ibídem).

Mas ya en marzo del 49 el Presidente Mao dijo:

“Triunfar en todo el país es solo el primer paso de una larga marcha de diez mil li. Este paso, aunque sea digno de nuestro orgullo, resulta relativamente minúsculo; lo que aun está por venir será mucho más digno de nuestro orgullo. La victoria de la revolución democrática popular de China, mirada retrospectivamente después de varios decenios, parecerá solo el breve prólogo de un largo drama. Un drama comienza por el prólogo, pero el prólogo no es la culminación. La revolución China es grandiosa, pero después de la revolución, el camino será aun mas largo y nuestra tarea, aún mas grandiosa y mas ardua”.

Así como en “Sobre el tratamiento correcto de las contradicciones en el seno del pueblo”, su gran obra de febrero del 57, especificó:

“Pero nuestro sistema socialista acaba de instaurarse; aún no esta cabalmente establecido ni consolidado por completo”. Y: “Toda cosa nueva experimenta dificultades y reveses en su crecimiento. Sueña quien crea que la causa del socialismo es como navegar viento en popa, empresa de éxito fácil en la que no se tropieza con dificultades ni se sufren reveses ni se requieren inmensos esfuerzos”.

En este mismo texto se reafirma la lucha de clases en el socialismo, y principalmente se sienta que en definitiva no esta resuelto quién vencerá a quien; esto es si el socialismo o el capitalismo vencerá políticamente, es decir en la lucha de clases actualmente en desarrollo, pues históricamente, en perspectiva, el socialismo necesariamente se impondrá; vencerá ineluctablemente:

“En China, aunque en lo fundamental se ha consumado la transformación social es la de la propiedad y han terminado las vastas y tempestuosas luchas de clase de las masas, características de los anteriores períodos revolucionarios, subsisten remanentes de las clases derrocadas: la clase terrateniente y la burguesía compradora; subsiste la burguesía, y la transformación de la pequeña burguesía solo acaba de empezar. La lucha de clases no ha terminado. La lucha de clases entre el proletariado y la burguesía, entre las diferentes fuerzas políticas y entre el proletariado y la burguesía en el terreno ideológico, será aun larga, tortuosa y a veces incluso muy enconada. El proletariado aspira a transformar el universo según su concepción del mundo, y la burguesía, según la suya. A este respecto, aun no ha sido resuelta en definitiva la cuestión de quien vencerá: el socialismo o el capitalismo.”

En “Discurso ante la Conferencia Nacional del Partido Comunista de China sobre el trabajo de propaganda”,
febrero de 1957, el Presidente Mao trata sobre las grandes transformaciones que genera el socialismo, su consolidación gradual, su necesidad de un largo período histórico para consolidarse y la seguridad de construir un Estado socialista:

“Estamos viviendo un período de grandes cambios sociales. Durante un largo tiempo la sociedad China ha estado sufriendo grandes transformaciones. La Guerra de Resistencia contra el Japón fue una de ellas y, la otra, la Guerra de Liberación. Pero el carácter del cambio actual es mucho mas profundo que el de los anteriores. Estamos ahora construyendo el socialismo. Cientos de millones de personas participan en el movimiento de transformación socialista. Las relaciones de clase están cambiando en todo el país. La pequeña burguesía agrícola y artesanal y la burguesía de la industria y el comercio han sufrido ambas un cambio. Se ha transformado el sistema económico de la sociedad; la economía individual es ahora economía colectiva y la propiedad privada capitalista esta siendo transformada en propiedad publica socialista. Cambios de tal magnitud, por supuesto se reflejan en la mentalidad de la gente. La existencia social del hombre determina su conciencia. La gente de diferentes clases, estratos y grupos sociales reaccionan de diverso modo ante los grandes cambios de nuestro sistema social. Las grandes masas del pueblo vehementemente los apoyan, dado que la vida misma confirmó que el socialismo es el único camino para China. Eliminar el antiguo sistema social y establecer uno nuevo, el sistema del socialismo, es una gran batalla, un gran cambio en el sistema social y en las relaciones de los hombres entre si. Debe decirse que, básicamente, la situación es saludable. Pero el nuevo sistema social recién ha sido establecido y requiere tiempo para su consolidación. No debe suponerse que el nuevo sistema puede ser totalmente consolidado en el mismo momento en que se implanta, porque eso es imposible. La consolidación debe ser gradual. Para lograr su firmeza final es necesario no sólo llevar a cabo la industrialización socialista del país y perseverar en la revolución socialista en el frente económico, sino también sostener constante y ardua lucha revolucionaria socialista y poner en ejecución la educación socialista en los frentes político e ideológico. Además, se requiere la contribución de diversos factores internacionales. En China la lucha para consolidar el sistema socialista, la lucha para decidir cual prevalecerá: el socialismo o el capitalismo, cubrirá un largo período histórico. Pero todos debemos advertir que este nuevo sistema del socialismo, incuestionablemente se consolidara. Con toda seguridad podemos construir un Estado socialista con moderna industria, moderna agricultura, y modernas ciencia y cultura.”

Otro problema sustantivo de la cuestión fundamental analizada, socialismo y dictadura del proletariado, es la construcción y desarrollo del socialismo; sobre éste el maoísmo parte de:

“¿qué pasara si nuestro país no establece una economía socialista? Se convertirá en un país revisionista, de hecho en un Estado burgués, y la dictadura del proletariado se transformara en dictadura de la burguesía; es mas, en una dictadura reaccionaria y fascista. Este es un problema que merece nuestra alta vigilancia y espero que los camaradas reflexionen seriamente sobre él”. “En cuanto a la construcción de una poderosa economía socialista, China requiere, no ya 50 años, sino cien o un tiempo aún más largo. En su país (Inglaterra), el desarrollo del capitalismo llevó varios centenares de años. Quedo fuera de la cuenta el siglo XVI, que forma parte de la Edad Media. Del siglo XVII hasta ahora, ya han pasado más de 360 años. En nuestro país, la construcción de una poderosa economía socialista, según mi cálculo, requerirá más de una centuria”.
“Más de tres siglos de desarrollo han necesitado las fuerzas productivas del capitalismo para llegar a lo que son hoy día. En comparación con el capitalismo, el socialismo tiene muchas ventajas. El desarrollo económico de nuestro país será mucho más rápido que el de los países capitalistas. Sin embargo, China tiene una inmensa población, su base es débil y su economía atrasada”.
“Si se emplearon tres siglos y varios decenios para construir una poderosa economía capitalista, ¿qué tiene de malo construir una poderosa economía socialista en nuestro país en un período de unos 50 a unos 100?”.

Y llama a pensar en que:
 
 “Respecto a la construcción socialista, aún actuamos muy a ciegas. Para nosotros, la economía socialista es, en muchos aspectos, un incógnito reino de la necesidad”.

Así como, por otro lado, establece:

“¿Socialismo o comunismo? ¿En qué momento se puede decir que ha acabado la construcción del socialismo? Hemos formulado dos criterios:
1. La conclusión de la construcción del socialismo se manifiesta por la aplicación general del sistema socialista de propiedad de todo el pueblo.
2. Cuando el sistema de propiedad de todo el pueblo haya reemplazado al sistema de propiedad colectiva de las comunas populares.
Ciertos camaradas no están de acuerdo en distinguir ambos sistemas de propiedad. Pretenden que en las comunas populares sólo existe el sistema de propiedad de todo el pueblo. En realidad hay dos sistemas: Uno es el sistema de propiedad de todo el pueblo del tipo Aceria de Anshan, el otro es el sistema de propiedad de la gran colectividad de la comuna popular.
Si se ignora esto, ¿para qué sirve entonces la edificación socialista? Stalin trazó la línea de demarcación entre los dos sistemas y preconizó tres condiciones para pasar al comunismo. Dichas tres condiciones fundamentales no son malas.
Las dos primeras pueden ser resumidas como sigue:
1) aumento de la producción social; 2) pasaje del sistema de propiedad colectiva al sistema de propiedad de todo el pueblo; sustitución del sistema de intercambio de mercancías por un sistema de intercambio de productos; pasaje de la etapa del valor de cambio a la etapa del valor de uso. En China las dos condiciones significan: 1) aumentar enérgicamente la producción y desarrollar simultáneamente la industria y la agricultura, siempre conservando el principio de crecimiento preferencial de la industria pesada; 2) llevar el sistema de propiedad de la pequeña colectividad al nivel de sistema de propiedad de todo el pueblo. Quienes entre nosotros trazan líneas demarcatorias y pretenden que ya entramos en la era del sistema de propiedad de todo el pueblo se equivocan.

La tercera condición fijada por Stalin concierne a la cultura: preconiza un incremento de la educación física y de la educación de todo el pueblo. Para alcanzar este objetivo, Stalin propone cuatro medidas: 1) la jornada de trabajo de seis horas; 2) la institucionalización de la educación politécnica; 3) el mejoramiento de las condiciones de vivienda; 4) el aumento de salarios y la disminución de los precios.
Las tres condiciones de Stalin son excelentes, pero falta una condición político-ideológica. Dichas condiciones, citadas arriba, tienden esencialmente a aumentar la producción. Una abundancia muy grande de producción facilita, en efecto, el pasaje del sistema de producción colectiva al sistema de propiedad de todo el pueblo. Pero para aumentar la producción es preciso producir más, mas rápidamente, mejor y de una manera más económica. Y si se quiere llegar a ese resultado es preciso poner la política en el puesto de mando y esforzarse para alcanzar simultáneamente los cuatro objetivos: cantidad, rapidez, calidad, economía. También es preciso lanzar movimientos de rectificación para destruir la ideología del poder legal de la burguesía.
Sumar una forma de estructura tal como la comuna popular a un país como China es volver más fácil la realización de los cuatro objetivos: cantidad, rapidez, calidad, economía.
¿Cuál es la significación del sistema general de propiedad de todo el pueblo? Este sistema significa: 1) que los medios de producción de la sociedad pertenecen a todo el pueblo; 2) que los productos de la sociedad pertenecen a todo el pueblo.
¿Cuál es la naturaleza de la comuna popular? Es la unidad de base de la estructura social China que agrupa obreros, campesinos, soldados, intelectuales y comerciantes. Actualmente constituye la organización administrativa de base.
En cuanto a la milicia, está destinada a enfrentar al extranjero, particularmente al imperialismo.
La comuna popular es la mejor forma de organización para la realización de los dos pasajes: el pasaje del socialismo de hoy al sistema general de propiedad de todo el pueblo, y el pasaje del sistema general de propiedad de todo el pueblo al comunismo. Luego de estos pasajes, la comuna popular constituirá la estructura de base de la sociedad comunista.” (“Sobre ‘Problemas económicos del socialismo en la URSS’ de Stalin”).


EL DOCUMENTO COMPLETO LO PUEDEN ENCONTRAR EN LA PÁGINA DE MAR ARMADO DE MASAS EN LA SIGUIENTE DIRECCIÓN WEB: http://mar-armado.blogspot.com/

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