sábado, 28 de diciembre de 2013

¡UNIR A LOS PARTIDOS COMUNISTAS IMPONIENDO EL MAOÍSMO COMO MANDO Y GUÍA DE LA REVOLUCIÓN MUNDIAL! ... MPP - PCP

¡Proletarios de todos los países, uníos!

“Los jefes del partido del proletariado, ya sean miembros del Comité Central o de los comités locales, surgen de la lucha de clases y del movimiento revolucionario de las masas. Son infinitamente fieles a las masas, están íntimamente ligados a ellas, saben sintetizar con acierto sus ideas y poner luego en práctica las ideas así sintetizadas. Los jefes de este tipo son representantes verdaderos del proletariado y generalmente reconocidos como tales por las masas. La presencia de jefes de este tipo en un partido del proletariado es indicio de la madurez política de dicho partido; en ellos reside la esperanza de la victoria de la causa del proletariado.”

Redacción del Renmin Ribao y la Redacción de la revista Hongqi - Sobre el problema de Stalin, 1963

Hoy el imperialismo se hunde en su crisis final. Las potencias imperialistas tratan de salir de ésta disputándose los mercados, materias primas, esferas de influencia, para poder reimpulsar sus quebradas economías, para reflotar al imperialismo acorde a sus propios intereses. En estas condiciones la guerra imperialista y el fascismo se han convertido en una necesidad de las burguesías imperialistas. En todo el planeta y, principalmente en los países del tercer mundo, las masas se organizan y combaten al imperialismo, a la reacción y al revisionismo. Son millones de proletarios y campesinos pobres los que combaten bajo la bandera del maoísmo en el Perú, India, Filipinas, etc. Las masas más profundas saben que sólo combatiendo al revisionismo y con guerra popular, con la dirección de Partidos Comunistas, se puede llegar a la sociedad sin clases, el dorado comunismo.

Todo avance del movimiento comunista se ha dado en lucha en contra de las posiciones de la burguesía dentro de él. Así, Marx y Engels combatieron a Bakunin, a Duhring, etc. A Lenin le correspondió combatir y aplastar el revisionismo surgido de la II Internacional (Kautsky, Bernstein, Plejánov, etc.). El camarada Stalin justa y correctamente planteó que se había entrado en la etapa del leninismo como desarrollo del marxismo y combatió el revisionismo de Trotsky y otros en defensa del marxismo, de la revolución bolchevique y de la revolución proletaria mundial.

El maoísmo como tercera, nueva y superior etapa del marxismo se forjó en combate directo contra el imperialismo, la última etapa del capitalismo. Esto significó enarbolar la lucha revolucionaria frente a guerras mundiales y el afán depredador y genocida del imperialismo. Los campos se abrieron y se presentó el movimiento proletario internacional, los movimientos de liberación nacional, pero también se dió la restauración del capitalismo en la URSS y, por tanto, la lucha a muerte contra el revisionismo de Jruschov, contra la tesis revisionista de la “coexistencia pacífica”, el revisionismo de Teng, Liu, Lin Piao, entre otros. Hay que resaltar que el Presidente Mao dirigió dos grandes cumbres e hitos de la revolución proletaria mundial en el siglo XX: la revolución China en 1949 y la Gran Revolución Cultural Proletaria (que abarcó toda una década: de 1966 a 1976), y fue reconocido como Jefatura y como el más alto, consecuente y elevado cuadro y dirigente de la revolución china.

Es el Presidente Gonzalo el que asume la tarea de establecer el maoísmo como tercera, nueva y superior etapa del marxismo, y es, el mismo Presidente Gonzalo, quien es reconocido como jefe del Partido y la revolución, y del Comité Central del Partido Comunista del Perú, en dura y contundente lucha contra el viejo revisionismo y el nuevo revisionismo con membrete de “maoísta”: “maoísmo” domesticado que apunta a la traición de la clase, que tiene como objetivo felón e infame la negociación y la participación en el circo electoral del viejo y podrido Estado.

El Presidente Mao ha desarrollado tanto la filosofía marxista, la economía política y el socialismo científico.

En economía política estableció que la política está al mando, combatiendo la tesis revisionista de las “fuerzas productivas”. Aplicando la dialéctica estableció que la conciencia puede modificar la realidad y con el poder político desarrollar las fuerzas productivas. Un extraordinario ejemplo fue el “Gran Salto Adelante”. Aplicando la dialéctica y en crítica a la construcción del socialismo en la URSS, en Corea del Norte y en los países del Este, el PCCh toma como centro la industria pesada y simultáneamente como base a la industria ligera y a la agricultura. El Gran Salto Adelante supuso la participación de las masas, millones de proletarios y campesinos pobres pusieron su empeño en transformar las relaciones de producción para desarrollar las fuerzas productivas, plasmándose el hecho de que son las masas las que hacen la historia dirigidas por su Partido y no los técnicos. En lo orgánico se plasmó la comuna popular.

En cuanto al socialismo científico la Gran Revolución Cultural Proletaria es lo más trascendental del desarrollo del marxismo-leninismo. Nuevamente, aplicando la dialéctica a la realidad y viendo la relación entre superestructura e infraestructura, el Presidente Mao definió los objetivos y los blancos de la GRCP:

“Aunque derrotada, la burguesía todavía trata de valerse de las viejas ideas, cultura, hábitos y costumbres de las clases explotadoras para corromper a las masas y conquistar la mente del pueblo en su esfuerzo por restaurar su Poder. El proletariado debe hacer exactamente lo contrario: debe propinar golpes despiadados y frontales a todos los desafíos de la burguesía en el dominio ideológico y cambiar la fisonomía espiritual de toda la sociedad utilizando sus propias ideas nuevas, cultura, hábitos y costumbres. Nuestro objetivo actual es aplastar, mediante la lucha, a los que ocupan puestos dirigentes y siguen el camino capitalista, criticar y repudiar la ideología de la burguesía y demás clases explotadoras, y transformar la educación, la literatura y el arte y los demás dominios de la superestructura que no corresponden a la base económica del socialismo, a fin de facilitar la consolidación y el desarrollo del sistema socialista”.

Por tanto, lo fundamental del maoísmo es el Poder. O estamos por el Poder para la clase obrera o sino estamos sirviendo a contener la revolución al servicio del Poder de la burguesía.

Hoy el maoísmo se expresa en su forma más alta en las guerras populares y principalmente en la guerra popular del Perú. Las masas armadas y dirigidas por el PCP construyen Nuevo Poder, a la vez que destruyen el viejo Poder sin ponerse a la cola de ninguna potencia imperialista. El CC del PCP desarrolla la guerra popular al servicio de la revolución proletaria mundial combatiendo en el Perú a toda capitulación, mantiene el rumbo aplastando al nuevo revisionismo de la LOD y de la LOI; y a nivel internacional combate el nuevo revisionismo de Avakian, Prachanda y todas las convergencias. Mantiene en alto el principio de que “el Poder nace del fusil” y combate el plan imperialista de “acuerdos de paz”. Dentro de esta lucha está el reventar la nueva patraña que está montando el imperialismo, la reacción peruana y el revisionismo contra la guerra popular del Perú y contra su Jefatura. Ahora, la reacción peruana está promoviendo supuestas “visitas” al Presidente Gonzalo para 2014. Con la colaboración de las ratas de la LOD y a través de una supuesta sustitución del bellaco abogaducho Crespo, han asignado a otro abogado, un tal Carl Peter Erlinder, para la “defensa” del Presidente Gonzalo en la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Como las masas y el pueblo saben, el felón de Crespo es hoy cabeza del plan de “amnistía” y un cretino electorero. Con estas “visitas” y con este nuevo abogado apuntan a limpiarse, a decir que el Presidente está enfermo entre otras argucias y embustes, para seguir evitando la presentación pública y continuar con la patraña de los “acuerdos de paz”, patraña que ha sido volada en mil pedazos una y otra vez por el propio desarrollo de la guerra popular dirigida por el CC del PCP.

Nosotros en estas fechas celebrando los natalicios del Presidente Mao y del Presidente Gonzalo tomamos posición y decimos al imperialismo, a la reacción y al revisionismo, que no se saldrán con la suya, que otra vez sus tretas serán aplastadas y despanzurradas; nosotros nos reafirmamos en que por más farsas e infundios que se inventen, por más que quieran desviar a las masas del camino de la revolución y de la guerra popular, el pueblo y la clase lo tiene claro: sólo con Partidos Comunistas de nuevo tipo, marxistas-leninistas-maoístas, militarizados, que dirijan omnímodamente guerras populares sin claudicar en los principios, alcanzaremos la sociedad sin clases, el dorado comunismo.

¡VIVA EL CXX ANIVERSARIO DEL NATALICIO DEL PRESIDENTE MAO TSE-TUNG!
¡VIVA EL MAOÍSMO! ¡ABAJO EL REVISIONISMO!
¡UNIR A LOS PARTIDOS COMUNISTAS IMPONIENDO EL MAOÍSMO COMO MANDO Y GUÍA DE LA REVOLUCIÓN MUNDIAL!
¡GUERRA POPULAR HASTA EL COMUNISMO! 
26 de diciembre de 2013

¡VIVA MAO, HOMBRE PENSANTE Y OPERANTE! ... PCE

Nuestro Partido saluda efusivamente este 120 aniversario del natalicio del Presidente Mao Tsetung. Celebramos este gran acontecimiento continuando con la lucha revolucionaria en nuestro país y publicando la biografía de nuestro camarada, que contiene grandes enseñanzas de validez universal y vigencia actual.

BIOGRAFÍA DEL PRESIDENTE MAO TSETUNG

Político y filósofo comunista. Continuador del pensamiento y la obra de Carlos Marx, F. Engels, Lenin y Stalin.

Nació el 26 de diciembre de 1893 en la aldea de Shaoshan, región de Xiangtang, provincia de Junán. Su entorno familiar estuvo conformado por agricultores.

A fines de la década de 1900 ingresó a estudiar en la Escuela de Magisterio en Changsha. Participó en el derrocamiento de la dinastía Ching (1911), por lo que dejó temporalmente sus estudios. Posteriormente se graduó en la Primera Universidad Normal de Junán en 1918. Durante algunos años trabajó como asistente de bibliotecario en la Universidad de Pekín.


Mao Tsetung desde su época universitaria se fue perfilando como un destacado revolucionario, participaba de los debates políticos y filosóficos acerca del marxismo.

En Pekín contrajo matrimonio con la estudiante universitaria Yang Kaihui, quien posteriormente fue asesinada por las fuerzas del Kuomintang.

A los 27 años de edad participó en el Congreso Fundacional del Partido Comunista de China realizado el 1 de julio de 1921. En dicho evento, pese a que estuvieron tan solo una decena de camaradas, Mao Tsetung planteó con firmeza ante los asistentes: “El marxismo salvará a China”, pues tenía un férreo optimismo de clase y sabía que el PCCH, pequeño en un inicio, crecería una vez que se involucre en la vida y lucha de las masas.

En 1923 fue elegido miembro del Comité Central y en 1924 estalla la Primera Guerra Civil Revolucionaria; se conforma el Frente Único entre el PCCH y el Kuomintang. En el año de 1926 se desarrolla la expedición al Norte del Ejército Revolucionario, período durante el cual Mao Tsetung establece la línea fundamental de la revolución democrática de nuevo tipo, definiendo correctamente cuáles son sus aliados y cuales sus enemigos. “…son nuestros enemigos todos aquellos que están confabulados con el imperialismo: los caudillos militares, los burócratas, la burguesía compradora, la clase de los grandes terratenientes y el sector reaccionario de la intelectualidad subordinado a todos ellos. El proletariado industrial es la fuerza dirigente de nuestra revolución. Nuestros amigos más cercanos son todo el semiproletariado y toda la pequeña burguesía. En cuanto a la vacilante burguesía media, su ala derecha puede ser nuestro enemigo, y su ala izquierda, nuestro amigo; pero debemos mantenernos constantemente en guardia y no permitirle que cree confusión en nuestro Frente.” (Mao Tsetung. Análisis de las clases de la sociedad China).

En ese año se presenta una línea oportunista de derecha por parte de Chen Tu-siu consistente en capitular en el frente único.

A comienzos de 1927, Mao Tsetung realiza un importante recorrido por su tierra natal conociendo a fondo la realidad económico-social del campesinado; producto de esto escribe el documento: “Informe sobre una investigación del movimiento campesino de Junán”.

En abril de 1927 el Kuomintang dominado por Chiang Kai-Shek da un golpe de Estado contrarrevolucionario aplastando a las masas y al Partido. En agosto, se produce una fuerte lucha de dos líneas al interior de la dirección del PCCH. El Comité Central rectifica la línea y destituye a Chen Tu-siu.

En septiembre del mismo año Mao Tsetung dirige el “Levantamiento de la Cosecha de Otoño”; crea en las montañas de Chingkang la primera Base de Apoyo Revolucionaria y organizó el Ejército Rojo. Esa base fue el embrión del nuevo Estado conocido como la “República Soviética de China” o a veces llamada también “sóviet de Jiangxi” del cual Mao fue nombrado presidente.

Entre los años 1927, 1928 y 1929 Mao fue diseñando la estrategia de la guerra popular, que en su primera etapa tiene como centro táctico desarrollar la guerra de guerrillas. “Cuando el enemigo avanza retrocedemos, cuando el enemigo acampa lo hostigamos, cuando no quiere pelear lo atacamos y cuando huye lo perseguimos” (Mao Tsetung).

En los años 1929, 1930 y 1931 se producen sucesivamente varias líneas oportunistas de “izquierda” encabezadas por Chu Chiu-pai, Li Li-san y Wang Ming las mismas que cuestionaban el liderazgo del presidente Mao y planteaban erróneas estrategias militares.

En 1934 el Kuomintang lanza la quinta campaña de cerco y aniquilamiento con un millón de soldados en contra de las Bases de Apoyo Revolucionarias. Las líneas “izquierdistas”, contra la dirección de Mao, impulsan una errónea táctica militar para enfrentar al Kuomintang: guerra de posiciones, ejército contra ejército relegando por completo la guerra de guerrillas. Es derrotado el Ejército Rojo y se repliegan hacia el interior de China. En octubre del mismo año comienza la “Larga Marcha”.

En enero de 1935 se realizó la “Reunión de Tsunyi”, el PCCH rechazó las líneas oportunistas de derecha disfrazadas de “izquierda”, estableció una dirección encabezada por el Presidente Mao y adhirió a su línea.

En noviembre de 1935 culminó la “Larga Marcha” tras haber recorrido aproximadamente 12 mil kilómetros y haber salvado al Partido Comunista y al Ejército Rojo de una muerte segura.

Producto de la invasión japonesa a China, en 1937 se vuelve a conformar el Frente Único entre el PCCH y el Kuomintang. Mao impulsa la firma de un programa de 10 puntos, cuyo centro es poner momentáneamente fin a la guerra civil en función de unirse para organizar la Guerra de Resistencia contra el Japón. La alianza se sella con la condición de que cesen los ataques al Partido Comunista y al Ejército Rojo. "El frente unido, la lucha armada y la construcción del Partido constituyen, pues, tres cuestiones fundamentales de nuestro Partido en la revolución china. Una comprensión correcta de estas tres cuestiones y de sus relaciones mutuas significa ya una dirección acertada de toda la revolución china" (Mao Tsetung)

Sobre las relaciones con la burguesía nacional en el Frente Único, Mao plantea que “cuando nos unimos no olvidar que va a traicionar, y cuando traiciona no olvidar que nos vamos a tener que volver a unir”.

La no comprensión de algunos dirigentes sobre el Frente Único, llevó a que cuadros como Wang Ming asumieran posiciones oportunistas de derecha como la capitulación ante el Kuomintang.

Mao Tsetung desarrolló magistralmente las tesis de Carlos Marx y Lenin acerca de cómo entender la etapa democrática de la revolución y la etapa socialista, según las condiciones históricas concretas de cada proceso. “Es evidente que, dada la naturaleza colonial, semicolonial y semifeudal de la actual sociedad, la revolución china ha de pasar por dos etapas. La primera consiste en transformar esa sociedad colonial, semicolonial y semifeudal en una sociedad democrática independiente, y la segunda, en hacer avanzar la revolución y construir una sociedad socialista. La revolución china se encuentra ahora en su primera etapa.”(Mao Tsetung. Sobre la Nueva Democracia)

De igual manera, Mao desarrolla la tesis del capitalismo burocrático, esto es un tipo de capitalismo sometido al imperialismo y anclado a la semi-feudalidad. ““El imperialismo «se alía en primer término con las capas dominantes del régimen social precedente –los señores feudales y la burguesía comercial-usurera-, contra la mayoría del pueblo. En todas partes, el imperialismo intenta preservar y perpetuar todas aquellas formas de explotación precapitalista (particularmente en el campo), que son la base de la existencia de sus aliados reaccionarios»…«[. . .] el imperialismo, con todo el poderío financiero y militar que tiene en China, es la fuerza que apoya, alienta, cultiva y conserva las supervivencias feudales, con toda su superestructura burocrático-militarista»” (La revolución china y el Partido Comunista de China)

En marzo de 1943 Mao es elegido presidente del Buró Político.

Después de la derrota y expulsión del Japón en 1945, comienza la guerra civil revolucionaria contra el Kuomintang. El Ejército Rojo es renombrado como “Ejército Popular de Liberación” (EPL). Surge el oportunismo de derecha de Liu Shao-chi quien plantea entregar las armas a Chiang Kai-shek a cambio de curules parlamentarios. El presidente Mao rechazó firme y cabalmente ese planteamiento, prosiguiendo la dirección de la guerra popular hacia la conquista del poder en todo el país.

El 21 de enero de 1949 las fuerzas del Kuomintang sufren una derrota masiva a manos del EPL, y comienzan a replegarse hacia el sur. A lo largo de este año van cayendo sucesivamente las ciudades más importantes.

El 1 de Octubre de 1949 el Presidente Mao proclama la fundación de la República Popular China.

En 1950 por disposición de Mao se promulga la Ley de Reforma Agraria que confisca toda la tierra de los terratenientes feudales (redistribuyéndola a los campesinos) y se confisca todo el capital burocrático.

Entre los años 1950 y 1957, el PCCH bajo la dirección de Mao, sienta las bases para el período de transformación socialista básica de los medios de producción (industria, agricultura, comercio y artesanía capitalistas).

En este periodo Liu Shao-chi plantea consolidar el “orden de Nueva Democracia” boicoteando el avance de la revolución a la etapa socialista. Junto a otros dirigentes en proceso de desviación ideológica, y estimulados por el desborde revisionista en el XX Congreso del PCUS (1956), Liu Shao-chi plantea la “liberalización burguesa” y “gobierno rotativo”.

En 1958 el Presidente Mao impulsa las 3 banderas rojas: Línea General, Gran Salto Adelante y la Comuna Popular.

En abril de 1959 los revisionistas despojan a Mao de la presidencia de la República, cargo que asume Liu Shao-chi, quien promueve una línea reformista.

La izquierda, sobre la base de una intensa y prolongada lucha de dos líneas, conserva la dirección del PCCH con Mao Tsetung a la cabeza.

Entre los años 1960 y 1963 la URSS revisionista concentra sus ataques contra la República Popular China, la misma que representaba el centro de defensa de los postulados fundamentales del marxismo-leninismo.

Mao Tsetung califica a la URSS como el “social-imperialismo soviético” (socialistas de palabra, imperialistas en los hechos) y publica un extraordinario documento en defensa de la vida y obra del camarada Stalin como centro de la defensa del marxismo-leninismo, titulado: “Sobre la cuestión de Stalin”. En dicho documento Mao resume la postura marxista-leninista para valorar a Stalin así: primero debemos defender los aciertos históricos de Stalin y luego criticar sus errores; y, de Stalin rescatamos el 70% de su obra. “Después de la muerte de Lenin, Stalin se convirtió no sólo en el principal dirigente del Partido y el Gobierno de la Unión Soviética, sino también en el líder reconocido del movimiento comunista internacional.” (Mao Tsetung)

En esos años el PCCH realiza una serie de escuelas políticas revolucionarias para los dirigentes comunistas de los partidos y organizaciones que persisten en la defensa y aplicación del marxismo-leninismo, siendo una de las más destacadas la “Escuela Político-Militar de Shangai” dirigida por Mao Tsetung para la formación de comunistas latinoamericanos.

Sobre la construcción del socialismo en China, Mao plantea en la X Sesión Plenaria del Comité Central del PCCH, realizada en septiembre de 1962, que: “La sociedad socialista cubre una etapa histórica bastante larga. Durante la etapa histórica del socialismo, aún existen clases, contradicciones de clase y lucha de clases: existe la lucha entre el camino socialista y capitalista, y existe el peligro de restauración capitalista. Es preciso comprender lo larga y complicada que es esta lucha. Es imperativo elevar nuestra vigilancia. Es necesario realizar la educación socialista. Es necesario comprender y tratar de manera correcta el problema de las contradicciones de clase y de la lucha de clases y distinguir acertadamente las contradicciones entre nosotros y el enemigo de las existentes en el seno del pueblo, y tratarlas de manera correcta. De otro modo, un país socialista como el nuestro se convertirá en lo contrario, degenerará y se producirá la restauración.”

En mayo de 1963, Mao y el Comité Central lanzan la campaña del “Movimiento de Educación Socialista”. Mao advierte que si se abandona la lucha de clases se produciría “fatalmente una restauración contra-revolucionaria en escala nacional, el partido marxista-leninista se transformaría en partido revisionista o fascista, y toda China cambiará de color”.

Frente a la arremetida de los elementos revisionistas en el PCCH, en el Estado y el Ejército, el Presidente Mao, en la XI Sesión Plenaria del VIII Comité Central del PCCH (entre el 1 y 12 de agosto de 1966), plantea desarrollar la Gran Revolución Cultural Proletaria con el objetivo máximo de “profundizar el camino socialista y combatir el peligro de la restauración capitalista”.

“La gran Revolución Cultural proletaria que se desenvuelve actualmente, una gran revolución que llega al alma misma de la gente, representa una nueva etapa, aún más profunda y más amplia, en el desarrollo de la revolución socialista de nuestro país… Hay que concentrar todas las fuerzas para asestar golpes al puñado de derechistas burgueses ultrareaccionarios y de revisionistas contrarrevolucionarios, y desenmascarar y criticar plenamente sus crímenes contra el Partido, el socialismo y el pensamiento de Mao Tse-tung, al fin de aislarlos al máximo. El blanco principal del movimiento actual son aquellos elementos en el seno del Partido que ocupan puestos dirigentes y siguen el camino capitalista.” (Documento de los 16 puntos).

La GRCP es el mayor movimiento político de masas que ha existido en la historia de la humanidad; por sus objetivos, sus métodos y duración es una de las epopeyas en la larga marcha del proletariado y el pueblo hacia el comunismo.

El IX Congreso del PCCH, realizado en abril de 1969, aplasta definitivamente a la línea contra-revolucionaria de Liu Shao-chi y se reconoce al Pensamiento Mao Tsetung como el marxismo-leninismo de la época actual.

Entre los años 1971, 1972 y 1973 Lin Piao y su camarilla levantan tesis derechistas y revisionistas; inclusive desatan un golpe de Estado armado contra-revolucionario e intentaron asesinar al Presidente Mao.

El revisionista Teng Siao-ping logra escalar posiciones y en 1975 es vice Primer Ministro, desde ese espacio lanza un ataque contra los logros de la GRCP.

En abril de 1976 el Comité Central del PCCH desata la lucha contra el programa general de Teng Siao-ping, quien es destituido.

El 9 de septiembre de 1976 falleció el Presidente Mao Tsetung. El proletariado y los pueblos de China y el mundo perdieron a uno de los más grandes líderes comunistas de todos los tiempos, maestro de maestros y jefe revolucionario consecuente con la causa de los oprimidos hasta las últimas consecuencias.

En octubre del mismo año se produjo el golpe anti-comunista de Hua Kuo-feng y posteriormente el revisionista Teng Siao-ping pasó a gobernar China y dirigir el Partido Comunista.

A partir de entonces, las conquistas logradas por la revolución fueron destruidas. Los dirigentes del PCCH se adueñaron de muchas empresas estatales y así se convirtieron en los “nuevos” capitalistas de ese país. Las masas se empobrecieron y la explotación y represión más desenfrenadas se volvieron realidad. Todo el país cambió de color y se convirtió en imperialista.

En esos duros años, el pensamiento y la obra de Mao Tsetung reciben el triple ataque del revisionismo soviético, albanés y chino, además de la furiosa campaña anti-comunista del imperialismo norteamericano.

Contra viento y marea, el legado del Presidente Mao Tsetung ha sido y es levantado por varios partidos comunistas de nuevo tipo, formados en las tormentas revolucionarias de los años 60 y 70 del siglo pasado.

Los aportes del Presidente Mao Tsetung en torno a la filosofía marxista, la economía política y el socialismo científico determinaron que sean considerados como la tercera, nueva y superior etapa del marxismo, deviniendo así como marxismo-leninismo-maoísmo.

El Partido Comunista del Perú ha demostrado en los hechos, con el desarrollo de la Guerra Popular, que el Maoísmo es la nueva, tercera y superior etapa del marxismo. Esta lucha por enarbolar, defender y aplicar el Marxismo-Leninismo-Maoísmo cuenta con el valioso soporte y aporte del Partido Comunista de la India (Maoísta) y la guerra popular que dirige, así como los aportes de las guerras populares en Filipinas y Turquía; y por una serie de destacamentos comunistas que se preparan para iniciar la Guerra Popular en sus respectivos países, para romper las cadenas de opresión imperialista, feudal y fascista.

La momentánea derrota de la revolución y el socialismo en la ex – URSS y en China hay que entenderla como parte de la lucha de clases que cubre toda la etapa del paso del capitalismo al socialismo a escala mundial, con victorias y derrotas; ya acertadamente nos enseñó Mao Tsetung que la ley del pueblo es: "Luchar, fracasar, volver a luchar, fracasar de nuevo, volver otra vez a luchar, y así hasta la victoria”.

El Presidente Mao Tsetung fue el principal organizador de la revolución china, tanto en sus etapas democrático como socialista; ideólogo de la Gran Revolución Cultural Proletaria contribuyó grandemente a resolver el problema de la continuación de la revolución socialista hacia el comunismo; combatiente anti-revisionista desenmascaró y aplastó a Jrushov y su camarilla.

Los comunistas y revolucionarios de nuevo tipo retomamos su legado y tenemos la gran tarea de trabajar para que el Maoísmo pase a comandar la nueva gran ola de la revolución proletaria mundial, para que las ideas de Marx, Lenin y Mao se fusionen en un solo torrente con las luchas del proletariado y los pueblos del mundo teniendo como meta suprema el Comunismo, la sociedad dorada donde desaparecerán para siempre la opresión y explotación sobre la faz de la Tierra.

COMITÉ DE RECONSTRUCCIÓN
PARTIDO COMUNISTA DEL ECUADOR


26/12/2013

VIVA 120 ANIVERSARIO NATALICIO PRESIDENTE MAO TSE-TUNG ... PCE - SR

Hoy los comunistas y los pueblos oprimidos del mundo conmemoramos el 120 aniversario del natalicio del Presidente Mao Tse-tung.

El mejor homenaje en su honor: el total reconocimiento a su aporte al marxismo-leninismo que devino en marxismo-leninismo-maoísmo. La férrea decisión de bregar por derrotar al imperialismo, a la gran burguesía, grandes terratenientes y al revisionismo.

El incondicional compromiso con la clase y el pueblo por realizar el esfuerzo vital por el partido, el pueblo y la revolución, materializando la construcción del Nuevo Poder como un componente más de la Revolución Proletaria Mundial.

Que conmemorar el 120 aniversario del natalicio del Presidente Mao Tse-tung se convierta en una gran convocatoria al proletariado y pueblos oprimidos del mundo para desatar la gran tormenta de la Guerra Popular por conquistar la Nueva Democracia, el Socialismo y el dorado Comunismo.


HONOR Y GLORIA PARA EL PRESIDENTE MAO TSE-TUNG
VIVA 120 ANIVERSARIO NATALICIO DEL PRESIDENTE MAO
VIVA EL MARXISMO-LENINISMO-MAOÍSMO
VIVA LA GUERRA POPULAR EN LA INDIA, TURQUÍA, FILIPINAS Y PERÚ
 
 A CONQUISTAR EL SOL ROJO DE LA LIBERACIÓN: EL COMUNISMO

120º aniversario del natalicio del Presidente Mao Tse-tung ... PERIÓDICO EL PUEBLO

26 de diciembre 2013

Hoy los pueblos del mundo conmemoramos el 120º aniversario del natalicio del Presidente Mao Tse-tung. Conmemoramos su nacimiento porque ha sido el Presidente Mao Tse-tung quien, en larga lucha contra el imperialismo y toda clase de oportunismo, elevó al marxismo a una nueva tercera y superior etapa.

Gracias al maoísmo, los pueblo del mundo y la clase obrera cuentan hoy con un arma poderosa y afilada para derrotar a los imperialistas y reaccionarios, ahogarlos en grandes olas de guerras populares. Es por esta razón que el Presidente Mao Tse-tung es tan odiado por imperialista y revisionistas y al mismo tiempo tan amado por los pueblos y los revolucionarios del mundo.

Encarnar o no encarnar el maoísmo para hacer la revolución es tan fundamental que la avanzada de la revolución proletaria mundial hoy, se desarrolla con guerras populares en Perú, India, Turquía y Filipinas, todas guerras populares dirigidas por Partidos Comunistas marxistas-leninistas-maoístas. por otra parte, aquellos partidos que no avanzaron al maoísmo, definitivamente capitularon y se diluyeron entre acuerdos de paz con el viejo Estado.
A continuación entregamos una parte del texto Documentos Fundamentales del CC del Partido Comunista del Perú, donde se fundamenta cómo el Presidente Gonzalo, jefatura del Partido Comunista del Perú, definió el maoísmo como nueva tercera y superior etapa del marxismo.

DOCUMENTOS FUNDAMENTALES (extractos)

Comité Central
Partido Comunista del Perú
1988

I. SOBRE EL MARXISMO-LENINISMO-MAOISMO.

La ideología del proletariado internacional, en el crisol de la lucha de clases, insurgió como marxismo deviniendo marxismo-leninismo y, posteriormente, marxismo-leninismo-maoísmo. Así, la todopoderosa ideología científica del proletariado, todopoderosa porque es verdadera, tiene tres etapas: 1) marxismo, 2) leninismo, 3) maoísmo; tres etapas, momentos o hitos de su proceso dialéctico de desarrollo; de una misma unidad que en ciento cuarenta años, a partir del "Manifiesto", en la más heroica epopeya de la lucha de clases, en encarnizadas y fructíferas luchas de dos líneas en los propios partidos comunistas y la inmensa labor de titanes del pensamiento y la acción que solamente la clase podía generar, sobresaliendo tres luminarias inmarcesibles: Marx, Lenin, Mao Tse-tung, mediante grandes saltos y tres grandiosos nos ha armado con el invencible marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo de hoy.

Sin embargo, mientras el marxismo-leninismo logró reconocimiento de su validez universal, el maoísmo no es reconocido plenamente como tercera etapa; pues, mientras unos niegan simplemente su condición de tal, otros sólo llegan a su aceptación como "pensamiento Mao Tsetung". Y, en esencia, en ambos casos, con las obvias diferencias que entre sí tienen, niegan el desarrollo general del marxismo hecho por el Presidente Mao Tsetung; no reconocerle su carácter de "ismo", de maoísmo, es negarle vigencia universal y, en consecuencia, su condición de tercera, nueva y superior etapa de la ideología del proletariado internacional: el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo que enarbolamos, defendemos y aplicamos.

Como INTRODUCCION para mejor comprender el maoísmo y la necesidad de luchar por él, recordemos a Lenin. Nos enseñó que conforme la revolución se adentraba al Este expresaba condiciones específicas que, si bien no negaban principios o leyes, eran nuevas situaciones que el marxismo no podía ignorar so pena de exponer la revolución al fracaso. Y que pese a la grita que particularmente la intelectualidad atiborrada de liberalismo y falsamente marxista, pedante y libresca, levantara en contra de lo nuevo, lo único justo y correcto es aplicar el marxismo a la realidad concreta y resolver las nuevas situaciones y problemas que toda revolución necesariamente enfrenta y resuelve; ante el espanto y farisaicas "defensas de la ideología, de la clase y del pueblo" que proclaman revisionistas, oportunistas y renegados, o los furibundos y ciegos ataques de embrutecidos académicos y plumíferos del viejo orden, envilecidos de podrida ideología burguesa, dispuestos a defender la vieja sociedad que parasitan. Más aún, expresamente Lenin dijo que la revolución en Oriente depararía nuevas y grandes sorpresas para mayor asombro de los adoradores de seguir sólo los caminos conocidos e incapaces de ver lo nuevo; y, como todos sabemos, encomendó a los camaradas orientales resolver problemas que aún el marxismo no había resuelto.

Además, tener muy presente que cuando el camarada Stalin justa y correctamente planteó que habíamos entrado a la etapa del leninismo como desarrollo del marxismo, también hubo oposición y quienes rasgaron sus vestiduras en supuesta defensa del marxismo; tener muy presente que, también del leninismo hubo quienes dijeron que solamente era aplicable a los países atrasados; pero en medio de lucha la práctica lo consagró como gran desarrollo del marxismo y la ideología del proletariado brilló victoriosa ante el mundo como marxismo-leninismo.

Hoy, el maoísmo enfrenta situaciones similares; y como siempre lo nuevo y el marxismo se han abierto paso a través de la lucha, el maoísmo así también se impondrá y será reconocido.

En cuanto al CONTEXTO en que se desenvolvió el Presidente Mao Tsetung y se forjó el maoísmo, internacionalmente sobre la base del imperialismo, guerras mundiales, movimiento proletario internacional, movimiento de liberación nacional, lucha entre marxismo y revisionismo y restauración del capitalismo en la URSS, tres grandes hitos históricos cabe destacar en el presente siglo: primero, la revolución de Octubre, 1917, que abre la era de la revolución proletaria mundial; segundo, triunfo de la revolución china, 1949, cambiando la correlación de fuerzas a favor del socialismo; y tercero, gran revolución cultural proletaria, iniciada el 66, como continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado para mantener el rumbo hacia el comunismo. Baste resaltar que el Presidente Mao dirigió dos de estos gloriosos hechos históricos.

Y en China, donde como centro de la revolución mundial se concretó el maoísmo, dentro de la más compleja convergencia de contradicciones, intensa y cruenta lucha de clases signada por las pretensiones de las potencias imperialistas de despedazar y repartirse China, el derrumbe del imperio manchú (1911), el movimiento antiimperialista del 19, las rebeliones del inmenso campesinado, los veintidós años de lucha armada de la revolución democrática, la gran contienda por la construcción y desarrollo del socialismo y los diez años de tormenta revolucionaria por llevar adelante la revolución cultural, en medio de la más aguda lucha de dos líneas en el P.C.Ch especialmente contra el revisionismo, y todo enmarcado en el panorama internacional descrito. Es de este conjunto de hechos históricos que debemos extraer cuatro de extraordinaria importancia: la fundación del Partido Comunista de China en 1921; el Levantamiento de la Cosecha de Otoño iniciando el camino del campo a la ciudad, en 1927; la fundación de la República Popular, 1949; y la Gran Revolución Cultural Proletaria, 1966-76; en todos los cuales el Presidente Mao fue protagonista y principalmente el más alto dirigente como jefe reconocido de la revolución china.

Así de la biografía del Presidente Mao Tsetung podemos decir que, nacido el 26 de diciembre de 1893, abrió los ojos en un mundo agitado por las llamas de la guerra; hijo de campesinos tenía siete años cuando la "Guerra de los boxers"; estudiante para maestro estaba por los dieciocho cuando se derrumbó el imperio, se alistó como soldado para después ser gran organizador de campesinos y jóvenes, en Junán su tierra natal. Fundador del Partido Comunista y del Ejército Rojo de obreros y campesinos; estableció el camino de cercar las ciudades desde el campo, desarrolló la guerra popular y con ella la teoría militar del proletariado; teórico de la Nueva Democracia fundó la República Popular; gestor del Gran Salto Adelante e impulsor del desarrollo del socialismo; guía de la lucha contra el revisionismo contemporáneo de Jruschov y sus secuaces, jefe y mando de la Gran Revolución Cultural Proletaria. Estos son hitos que jalonan una vida dedicada cabal y plenamente a la revolución. Tres gigantescos triunfos tiene el proletariado en este siglo; dos corresponden al Presidente Mao y si uno es suficiente gloria, dos lo son más.

Sobre el CONTENIDO del maoísmo, obviamente lo sustancial del mismo, debemos apuntar a las cuestiones básicas siguientes:

1. Teoría. El marxismo tiene tres partes: filosofía marxista, economía política marxista y socialismo científico; el desarrollo en todas ellas que genere un gran salto cualitativo del marxismo en su conjunto, como unidad a un nivel superior implica una nueva etapa. En consecuencia, lo esencial es mostrar que el Presidente Mao ha generado, como puede verse en la teoría y en la práctica, tal gran salto cualitativo. Por necesidad expositiva veamos ésto en el presente y siguientes puntos.

En la filosofía marxista desarrolló lo medular de la dialéctica, la ley de la contradicción estableciéndola como única ley fundamental; y aparte de su profunda comprensión dialéctica de la teoría del conocimiento, cuyo centro son los dos saltos que conforman su ley, (de la práctica al conocimiento y de éste a aquélla, siendo principal el del conocimiento a la práctica), resaltar que aplicó magistralmente la ley de la contradicción a la política; y más aún llevó la filosofía a las masas cumpliendo la tarea que Marx dejara.

En economía política marxista. El presidente Mao aplicó la dialéctica para analizar la relación base-superestructura y prosiguiendo la lucha del marxismo-leninismo contra la tesis revisionista de las "fuerzas productivas", concluyó que la superestructura, la conciencia pueden modificar la base y con el poder político desarrollar las fuerzas productivas. Y desarrollando la idea leninista de la política como expresión concentrada de la economía, estableció la política es el mando, (aplicable en todos los planos) y el trabajo político es la línea vital del trabajo económico; lo cual lleva a un verdadero manejo de la economía política y no a una simple política económica.

Una cuestión que se soslaya, no obstante su importancia, especialmente para quienes enfrentan revoluciones democráticas, es la tesis maoísta del capitalismo burocrático; esto es, el capitalismo que se desenvuelve en las naciones oprimidas por el imperialismo y con diverso grado de feudalidad subyacente u otras anteriores incluso. Este es un problema vital principalmente para Asia, Africa y América Latina, pues, de su comprensión deriva una buena conducción revolucionaria, máxime si de la confiscación del mismo depende, económicamente, la base para llevar adelante la revolución socialista como segunda etapa.

Pero, lo principal es que el Presidente Mao Tsetung ha desarrollado la economía política del socialismo. Es de suma importancia su crítica a la construcción socialista en la URSS; asimismo sus tesis sobre cómo desenvolver el socialismo en China: tomar la agricultura como base y la industria como dirigente; la industrialización guiándose por la relación entre la industria pesada, la ligera y la agricultura, tomando como centro de la construcción económica a la industria pesada y simultáneamente prestar plena atención a la industria ligera como a la agricultura. Cabe destacar el Gran Salto Adelante y las condiciones para su ejecución: uno, línea política que le dé justo y correcto rumbo; dos, formas orgánicas pequeñas, medianas y grandes de mayor a menor cantidad respectivamente; tres, un gran impulso, un gigantesco esfuerzo de las masas para ponerlo en marcha y llevarlo al éxito; salto adelante cuyos resultados se aprecian más por el proceso puesto en movimiento y su perspectiva histórica que por sus logros inmediatos; y su ligazón con la cooperativización agrícola y la comuna popular. Finalmente, tener muy en cuenta sus enseñanzas sobre la objetividad y subjetividad en la comprensión y manejo de las leyes del socialismo; que las pocas décadas de socialismo no han permitido ver su pleno desarrollo y por tanto el mejor conocimiento de sus leyes y su especificación; y principalmente la relación entre revolución y proceso económico, concretada en "empeñarse en la revolución y promover la producción". Sin embargo, pese a su trascendental importancia poco se trata este desarrollo de la economía política marxista.

En el socialismo científico el Presidente Mao desarrolló la teoría de las clases analizándolas en los planos económico, político e ideológico; la violencia revolucionaria como ley universal sin excepción alguna; la revolución como sustitución violenta de una clase por otra, estableció su gran tesis "El Poder nace del fusil" y resolvió la cuestión de la conquista del Poder en las naciones oprimidas a través del camino de cercar las ciudades desde el campo, estatuyendo sus leyes generales. Definió brillantemente desarrollándola la teoría de la lucha de clases en el socialismo, que en él prosigue la lucha antagónica entre proletariado y burguesía, entre camino socialista y capitalista y entre socialismo y capitalismo; que concretamente no estaba definido quién vencería a quién, problema cuya solución demandaría tiempo, el desenvolvimiento del proceso de restauración y contrarrestauración para que el proletariado se afincara definitivamente en el Poder mediante la dictadura del proletariado; y final y principalmente la grandiosa solución de trascendencia histórica de la Gran Revolución Cultural Proletaria como continuación de la revolución socialista bajo la dictadura del proletariado.

Estas cuestiones básicas, casi simplemente enunciadas pero conocidas e innegables, muestran el desarrollo del Presidente de las partes integrantes del marxismo y la evidente elevación del marxismo-leninismo a una nueva, tercera y superior etapa: el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo.

Prosiguiendo esta visión sintética, veamos otros puntos específicos que si bien derivan de lo anterior deben considerarse, aunque sea enumerativamente, para por lo menos destacarlos llamando la atención sobre ellos.
2. La Nueva Democracia. Primeramente es un desarrollo de la teoría marxista del Estado el establecimiento de los tres tipos de dictadura: 1) de la burguesía, en las viejas democracias burguesas como Estados Unidos, tipo al cual es asimilable la dictadura existente en las naciones oprimidas como las latinoamericanas; 2) la dictadura del proletariado como en la Unión Soviética o China antes de la usurpación del Poder por los revisionistas; y 3) la Nueva Democracia como dictadura conjunta basada en la alianza obrero-campesina dirigida por el proletariado encabezado por el Partido Comunista, lo que en China se plasmara a lo largo de su revolución democrática y en el Perú se concreta hoy en comités populares, bases de apoyo y República Popular de Nueva Democracia en organización. Es fundamental resaltar, dentro de este desarrollo de la teoría del Estado, la diferenciación clave entre sistema de Estado como dictadura de la clase o clases que ejercen el Poder, que es lo principal, y sistema de gobierno entendida como organización para el ejercicio del Poder.

Por otro lado, la Nueva Democracia, uno de los extraordinarios desarrollos del Presidente Mao, nos concreta magistralmente la revolución burguesa de nuevo tipo la que sólo puede dirigir el proletariado, en síntesis la revolución democrática dentro de la nueva era de la revolución proletaria mundial en que nos desenvolvemos. Revolución de Nueva Democracia que implica nueva economía, nueva política y nueva cultura, obviamente derrumbando el viejo orden y levantando lo nuevo con fusiles, única forma de transformar el mundo.

Finalmente, es importante resaltar que la Nueva Democracia, como revolución democrática si bien cumple, principalmente, las tareas democráticas también, complementariamente, avanza en algunas tareas socialistas; de esta forma se resuelve a fondo la cuestión de las dos etapas, democrática y socialista, que corresponden a países como el nuestro garantizándose, concluída la democrática, la prosecución como revolución socialista sin intermedio alguno, ininterrumpidamente.

3. Los tres instrumentos. El problema de la construcción de los instrumentos de la revolución plantea al Partido la comprensión de la interrelación del Partido, el ejército y el frente único; y, comprender y manejar la construcción interrelacionada de los tres en medio de la guerra o en el mantenimiento del nuevo Estado basado en el poderío del pueblo armado expresa una justa y correcta labor de dirección. La construcción se guía por principio de la justa y correcta línea ideológica lo decide todo, y es sobre esta base ideológico-política que simultáneamente se desarrolla la construcción organizativa, en medio de la lucha entre la línea proletaria y la burguesa y en la tempestad de la lucha de clases, principalmente de la guerra, como forma principal de lucha ya sea actuante o potencial.

En cuanto al Partido, el Presidente Mao parte de la necesidad del Partido Comunista, de un partido de nuevo tipo, un partido del proletariado, hoy diríamos un partido marxista-leninista-maoísta; un partido cuyo objetivo es conquistar el Poder y defenderlo, por lo cual está indesligablemente ligado a la guerra popular, ya sea para iniciarla, desarrollarla o librarla para defenderse; un partido sustentando en las masas ya sea por la propia guerra popular que es guerra de masas o del frente único que siendo frente de clases se basa en las masas mayoritarias. El Partido se desarrolla y cambia según las etapas de la revolución y los períodos que aquellas tengan; y el motor de su desarrollo es la contradicción concretada en su seno como lucha de dos líneas, entre línea proletaria y línea burguesa o no proletaria en general, en esencia y principalmente una lucha contra el revisionismo. Esto lleva a la importancia decisiva de la ideología en la vida partidaria y al desarrollo de campañas de rectificación que sirvan al mayor ajuste de todo el sistema de organizaciones partidarias y la militancia a las líneas ideológicas y políticas justas y correctas, en función del predominio de la línea proletaria y el mantenimiento de la dirección partidaria en sus férreas manos. El Partido sirve al establecimiento del Poder del proletariado, ya sea como clase dirigente de la Nueva Democracia y principalmente a la instauración de la dictadura del proletariado, su fortalecimiento y desarrollo para mediante revoluciones culturales conquistar la gran meta final, el comunismo; por eso el Partido tiene que llegar a dirigir todo omnímodamente.

El ejército revolucionario es de nuevo tipo, esto es un ejército para el cumplimiento de las tareas políticas que el Partido establece en función de los intereses del proletariado y del pueblo; carácter que se concreta en tres tareas: combatir, producir para no ser carga parasitaria y movilizar a las masas. Es un ejército que se basa en la construcción política a partir de la ideología del proletariado, del marxismo-leninismo-maoísmo (hoy), y la línea política general cuanto militar que el Partido establezca. Es un ejército que se basa en los hombres y no en las armas; un ejército surgido de las masas y siempre ligado a ellas a quienes sirve de todo corazón, permitiéndole moverse en su seno como el pez en el agua. Sin un ejército popular nada tendrá el pueblo, dice el Presidente Mao a la vez que nos enseña la necesidad de la dirección absoluta del Partido sobre el ejército y sienta su gran principio: El Partido manda al fusil y jamás permitiremos lo contrario. Además de establecer cabalmente los principios y normas de la construcción de un ejército de nuevo tipo, el mismo Presidente llamó a conjurar el uso del ejército para la restauración capitalista usurpando la dirección mediante un golpe contrarrevolucionario, y desarrollando tesis de Lenin sobre la milicia popular llevó más adelante que nadie el armamento general del pueblo, abriendo trocha y señalando el camino hacia el mar armado de masas que nos guiará a la -emancipación definitiva del pueblo y del proletariado.

Es el Presidente Mao Tsetung quien por vez primera desarrolla una teoría completa sobre el frente único y establece sus leyes. Un frente basado en la alianza obrero-campesina como garantía de la hegemonía del proletariado en la revolución; un frente de clases dirigido por el proletariado representado por el Partido; en síntesis un frente único bajo dirección del Partido Comunista; un frente único para la guerra popular, para la revolución, para la conquista del Poder en beneficio del proletariado y el pueblo. Así, en concreto, el frente único es la agrupación de las fuerzas revolucionarias contra las fuerzas contrarrevolucionarias para librar la lucha entre revolución y contrarrevolución principalmente mediante la guerra popular, armadamente. El frente único, como es evidente, no es igual en cada etapa de la revolución y, más aún, tiene sus especificaciones según los diversos períodos de cada etapa; asimismo el frente único en una revolución concreta no es igual que a nivel mundial, aunque ambos sigan las mismas leyes generales. Aparte de esto, es importante resaltar la relación entre frente y Estado que el Presidente Mao establece planteando que el frente único es una forma de dictadura conjunta, cuando se desenvolvía la guerra antijaponesa, cuestión que merece estudiarse especialmente por quienes afrontamos revoluciones democráticas.

4. La guerra popular es la teoría militar del proletariado internacional; en ella se resume, por vez primera en forma sistemática y completa, la experiencia teórica y práctica de las luchas, acciones militares y guerras libradas por el proletariado y la larga experiencia de la lucha armada popular y especialmente de las guerras campesinas de China. Es con el Presidente Mao que la clase logra tener su teoría militar; sin embargo, hay bastante confusión e incomprensión sobre este problema. Y la misma comienza por cómo se ve la guerra popular en China, generalmente se la considera, reducida y despectivamente como una simple guerra de guerrillas; ésto ya denota no comprender que con el Presidente Mao la guerra de guerrillas adquiere carácter estratégico; pero además, no se comprende el desarrollo de la guerra de guerrillas como desde su fluidez esencial desarrolla movilidad, guerra de movimientos, guerra de posiciones, desenvuelve grandes planes de ofensiva estratégica y conquista de ciudades pequeñas, medianas y grandes, de millones de habitantes, combinando el ataque desde fuera con la insurrección desde dentro. Así, en conclusión las cuatro etapas de la revolución china y principalmente desde la guerra agraria a la guerra de liberación popular, considerando entre ambas la guerra antijaponesa, muestran las diversas facetas y complejidades de la guerra revolucionaria librada durante más de veinte años, en una gigantesca población y una inmensa movilización y participación de las masas; en esa guerra hay ejemplos de todo tipo; y lo que es principal ha sido extraordinariamente estudiada y magistralmente establecidos sus principios, leyes, estrategia, táctica, normas, etc. Es, pues, en ese fabuloso crisol y sobre lo establecido por el marximo-leninismo que el Presidente Mao estableció la teoría militar del proletariado, la guerra popular.

Debemos tener muy presente que, posteriormente, el propio Presidente, con conocimiento de la existencia de bombas atómicas y cohetes y poseyéndolos, sostuvo y desarrolló la guerra popular para librarla en las nuevas condiciones de armas atómicas y guerra con potencias y superpotencias; en síntensis la guerra popular es el arma del proletariado y el pueblo incluso para enfrentarse a guerras atómicas.

Una cuestión clave y decisiva es la compresión de la validez universal de la guerra popular y su consecuente aplicación, teniendo en cuenta los diferentes tipos de revolución y las condiciones específicas de cada revolución. Servirá a esta cuestión clave considerar que no se ha repetido una insurrección como la de Petrogrado, la resistencia antifascista y las guerrillas europeas en la II Guerra Mundial, así como las luchas armadas que se libran en Europa actualmente; y ver que al fin y al cabo, la Revolución de Octubre no fue sólo insurrección sino una guerra revolucionaria que duró varios años. En consecuencia, en los países imperialistas la revolución sólo puede concebirse como guerra revolucionaria y ésta hoy es simplemente guerra popular.

Finalmente, hoy más que nunca los comunistas y los revolucionarios, el proletariado y el pueblo, necesitamos forjarnos en: "Sí, somos partidarios de la teoría de la omnipotencia de la guerra revolucionaria; eso no es malo; es bueno, es marxista"; lo que significa ser partidarios de la invencibilidad de la guerra popular.

5. La Gran Revolución Cultural Proletaria en perspectiva histórica es lo más trascendental del desarrollo del marxismo-leninismo por el Presidente Mao; es la solución del gran problema pendiente de la continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado; "representa una nueva etapa, aún mús profunda y más amplia, en el desarrollo de la revolución socialista de nuestro país".

¿Qué situación se presentó? Como dice la Decisión del P.C.Ch. sobre la GRCP: "Aunque derrocada, la burguesía todavía trata de valerse de las viejas ideas, cultura, hábitos y costumbres de las clases explotadoras para corromper a las masas y conquistar la mente del pueblo en su esfuerzo por restaurar su Poder. El proletariado debe hacer exactamente lo contrario: debe propinar golpes despiadados y frontales a todos los desafíos de la burguesía en el dominio ideológico y cambiar la fisonomía espiritual de toda la sociedad utilizando sus propias nuevas ideas, cultura, hábitos y costumbres. Nuestro objetivo actual es aplastar, mediante la lucha, a los que ocupan puestos dirigentes y siguen el camino capitalista, criticar y repudiar a las "autoridades" reaccionarias burguesas en el campo académico, criticar y repudiar la ideología de la burguesía y demás clases explotadoras, y transformar la educación, la literatura y el arte y los demás dominios de la superestructura que no corresponden a la base económica del socialismo, a fin de facilitar la consolidación y el desarrollo del sistema socialista".

En estas condiciones se produjo el más estremecedor proceso político y la mayor movilización de masas que ha visto la Tierra, cuyos objetivos los definió así el Presidente Mao: "La Presente Gran Revolución Cultural Proletaria es completamente necesaria y muy oportuna para consolidar la dictadura del proletariado, prevenir la restauración del capitalismo y construir el socialismo".

Destaquemos además dos cuestiones: 1) que la GRCP implica un hito en el desarrollo de la dictadura del proletariado hacia el afianzamiento del proletariado en el Poder, que se concretó en los Comités Revolucionarios; y 2) la restauración del capitalismo en China, después del golpe contrarrevolucionario del 76, no es la negación de la GRCP sino llanamente parte de la contienda entre restauración-contrarrestauración y, por el contrario, nos muestra la trascendental importancia histórica que tiene la GRCP en la inexorable marcha de la humanidad al comunismo.

6. Revolución mundial. El Presidente Mao acentúa nuevamente la importancia de la revolución mundial como unidad, partiendo de que la revolución es la tendencia principal en tanto la descomposición del imperialismo es mayor cada día, el papel de las masas más inmensas año a año que hacen y harán sentir su fuerza transformadora incontenible y en la gran verdad, por él reiterada de: todos entramos al comunismo o no entra nadie. Dentro de esta perspectiva específica en la época del imperialismo el gran momento histórico de los "próximos 50 a 100 años", y en su contexto el período que se abre de lucha contra el imperialismo yanqui y el socialimperialismo soviético, tigres de papel que se disputan la hegemonía y amenazan al mundo con una guerra atómica frente a la cual, primero hay que condenarla y luego prepararse anticipadamente para oponerle la guerra popular y hacer la revolución. Por otro lado, a partir de la importancia histórica de las naciones oprimidas y más aún de su perspectiva, así como de las relaciones económicas y políticas que están desenvolviéndose por el proceso de descomposición del imperialismo, el Presidente planteó su tesis de "tres mundos se delinean". Todo lo cual lleva a la necesidad de desarrollar la estrategia y la táctica de la revolución mundial. Lamentablemente poco o casi nada conocemos de los escritos y planteamientos del Presidente Mao sobre estas trascendentales cuestiones; sin embargo, lo muy poco conocido muestra las grandiosas perspectivas que avizoraba y los grandes lineamientos que debemos seguir para comprender y servir a la revolución proletaria mundial.

7. Superestructura, ideología, cultura, educación. Estos problemas y otros concernientes han sido sutil y profundamente estudiados y resueltos por el Presidente; por tanto, es también ésta otra cuestión básica que merece atención.

Concluyendo, el contenido visto en estas cuestiones básicas muestran, a quien quiere ver y entender, en forma palmaria que tenemos, pues, una tercera, nueva y superior etapa del marxismo: el maoísmo; y que ser marxista en la actualidad demanda ser marxista-leninista-maoísta y principalmente maoísta.
Lo expuesto en el contenido nos lleva a dos interrogantes:

¿Qué es lo fundamental del maoísmo? Lo fundamental del maoísmo es el Poder. El Poder para el proletariado, el Poder para la dictadura del proletariado, el Poder basado en una fuerza armada dirigida por el Partido Comunista. Más explícitamente: 1) El Poder bajo dirección del proletariado, en la revolución democrática; 2) el Poder para la dictadura del proletariado, en las revoluciones socialista y culturales; 3) el Poder basado en una fuerza armada dirigida por el Partido Comunista, conquistado y defendido mediante la guerra popular.

Y ¿qué es el maoísmo? El maoísmo es la elevación del marxismo-leninismo a una tercera, nueva y superior etapa en la lucha por la dirección proletaria de la revolución democrática, el desarrollo de la construcción del socialismo y la continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado, como revolución cultural proletaria; cuando el imperialismo profundiza su descomposición y la revolución ha devenido la tendencia principal de la historia, en medio de las más complejas y grandes guerras vistas hasta hoy y la lucha implacable contra el revisionismo contemporáneo.

Sobre la LUCHA EN TORNO AL MAOISMO. Escuetamente, en China la lucha por establecer el pensamiento Mao Tsetung comienza en 1935, en la Reunión de Tsunyi, cuando el Presidente Mao asume la dirección del Partido Comunista de China; el 45, el VII Congreso acordó que el PCCh se guiaba por el marxismo-leninismo y las ideas Mao Tsetung, especificación suprimida por el VIII, pues, en él primó una línea derechista. El IX Congreso del 69, resume la GRCP y sanciona que el P.C.Ch. se guía por el marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung; hasta ahí se avanzó.

A nivel internacional adquiere influencia a partir de la década del 50; pero es con la GRCP que se difunde intensamente y su prestigio se eleva poderosamente y el Presidente Mao pasa a ser reconocido jefe de la revolución mundial y generador de una nueva etapa del marxismo-leninismo; así gran número de Partidos Comunistas asumen la denominación marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung. A nivel mundial el maoísmo se enfrentó abierta y encarnizadamente con el revisionismo contemporáneo desenmascarándolo profunda y contundentemente, igualmente lo hizo en las propias filas del PCCh, lo cual elevó más aún la gran bandera roja del Presidente: la tercera, nueva y superior etapa de la ideología del proletariado internacional. En la actualidad el maoísmo afronta el triple ataque del revisionismo soviético, chino y albanés. Pero, además, hay incluso quienes reconocen grandes aportes del Presidente y hasta su desarrollo del marxismo, unos consideran que seguimos en la etapa del marxismo-leninismo y otros que solamente aceptan pensamiento Mao Tsetung pero en modo alguno maoísmo.

En el país, obviamente los revisionistas que siguen el bastón de mando de sus diferentes amos Gorbachov, Teng, Alía o Castro atacaron y siguen atacando furiosamente al maoísmo; entre éstos hay que condenar, desenmascarar y combatir implacablemente al encallecido revisionismo de Del Prado y su pandilla del llamado "Partido Comunista Peruano"; las sinuosidades rastreras del autodenominado "Partido Comunista del Perú, Patria Roja" que de autoerigirse en "grandes maoístas" pasaron a siervos de Teng, luego de haberlo condenado cuando su defenestración del 76; así como el antimaoísmo de la denominada "Izquierda Unida" en cuyo seno pululan todos los revisionistas y hasta posiciones antimarxistas pasando por los falsos marxistas y oportunistas de diversa laya. Enarbolar el maoísmo como espejo revelador de revisionistas para combatirlos implacablemente en función del desarrollo de la guerra popular y el triunfo de la revolución democrática en marcha, es insoslayable e inabdicable tarea de carácter estratégico.

El Partido Comunista del Perú, a través de la fracción dirigida por el Presidente Gonzalo que impulsó la reconstitución, asumió el marxismo-leninismo-maoismo el año 1966; el 79 la consigna de ¡Enarbolar, defender y aplicar el marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung!; el 81: ¡Hacia el maoísmo!; y, el 82 el maoísmo como parte integrante y desarrollo superior de la ideología del proletariado internacional: el marxismo-leninismo-maoísmo. Es con la guerra popular que hemos comprendido más profundamente lo que implica el maoísmo y asumido el solemne compromiso de ¡Enarbolar, defender y aplicar el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo!; y, bregar incansablemente por coadyuvar a ponerlo como mando y guía de la revolución mundial, única rojísima e inmarcesible bandera que es garantía de triunfo para el proletariado, las naciones oprimidas y los pueblos del mundo en su inexorable marcha combatiente, de legiones de hierro hacia el dorado y por siempre resplandeciente comunismo.

Editorial du 26 décembre 2013 .. PCMLMF

Il y a 120 ans naissait Mao Zedong, grande figure du matérialisme dialectique, au point que ses apports (on peut en consulter de nombreux sur maozedong.fr) forment le maoïsme, troisième étape du marxisme, la seconde étant le léninisme.

Célébrer Mao Zedong, c'est célébrer la révolution socialiste, avec en mémoire ce qu'explique Mao Zedong dans le grand classique De la contradiction : « la création et la propagation de la théorie révolutionnaire jouent le rôle principal, décisif. » Nous sommes fidèles de manière orthodoxe aux conceptions de Mao Zedong du maoïsme.

On ne peut pas mener la révolution sans connaître la réalité historique du pays, sans avoir des cadres comprenant les nécessités sociales et culturelles, dans un Parti capable de diriger le processus révolutionnaire et le nouvel Etat qui naît. lesmaterialistes.com est l'arme pour fournir aux masses populaires les outils historiques dont elles ont besoin !

Vídeo - A História demanda de nós um grandioso salto! .. MEPR


domingo, 22 de diciembre de 2013

PKM-NDFP proviene del CPP 45 años, hace un llamamiento a los sectores de base urbana para unirse a las asambleas populares en las zonas guerrilleras ... PCF


or ANDRES AGTALON 
Portavoz, Pambansang Katipunan mga ng Magbubukid

Campesinos revolucionarios bajo el Pambansang Katipunan mga ng Magbubukid - Frente Democrático Nacional (NDF PKM-, la Asociación Nacional de Campesinos) celebraron hoy un mitin relámpago en Quezon City para saludar a los 45 años del Partido Comunista de Filipinas. El PKM-NDF también pidió a los agricultores y los sectores democráticos de base urbana para unirse a las asambleas populares en las zonas de la guerrilla el 26 de diciembre.

"Si no fuera por la correcta dirección del CPP, el movimiento campesino revolucionario nunca se expandirá, incrementar y fortalecer a escala nacional", dice el portavoz de PKM-NDF Andrés AGTALON.

AGTALON dijo "aplicación ejemplar de la Parte de la teoría revolucionaria del marxismo-leninismo-maoísmo identificó correctamente el carácter básico y los problemas de la semi-colonial y la sociedad filipina semi-feudal."

"También es el Partido quien dijo que la revolución democrática popular, en la que el contenido principal es la revolución agraria, es la solución a la centenaria falta de tierras sufrida por el campesinado filipino", agregó AGTALON.

El PKM-NDF señaló práctica la lucha revolucionaria de los campesinos filipinos como una prueba viva de la dirección de la CPP.

"Continuar e incrementar la participación del campesinado revolucionario de la guerra popular y la pertenencia al Nuevo Ejército del Pueblo, y el avance de la revolución agraria en el campo demuestran claramente la exactitud del análisis del Partido y la línea política", dijo AGTALON.

El PKM-NDF pidió a los agricultores, los trabajadores, otros sectores democráticos juventud y los estudiantes, los profesionales, urbanas pobres, las mujeres, y para unirse a las asambleas populares en la celebración de la CPP 45 años de lucha revolucionaria que se celebrará en zonas guerrilleras en todo el país.

"Las actividades de comunicación para la marca de la CPP 45 años el 26 de diciembre celebraremos las victorias acumuladas de la Fiesta, y renovar el campesinado filipino y la determinación del pueblo para lograr la victoria completa de la revolución democrática del pueblo en el futuro cercano", dijo AGTALON.

DISCURSO DE STALIN NO METRÔ DE MOSCOU, A 6 NOVEMBRO DE 1941 ... MEPR

Como forma de homenagear o 134º aniversário do camarada Stalin, celebrado a 18 de dezembro ultimo, reproduzimos abaixo memorável discurso por ele pronunciado no metrô de Moscou, na véspera do 24º aniversário da gloriosa Revolução de Outubro, na qualidade de presidente do Comitê de Defesa do Estado. Era um sombrio mês de novembro de 1941. Naquele ano, em junho, o imperialismo alemão dirigido por Hitler iniciara sua selvagem guerra de agressão contra a pátria socialista. Após quatro meses de guerra, os exércitos nazistas haviam penetrado profundamente na União Soviética, e no fim do ano estendiam suas garras sobre grande parte da Ucrânia, da Bielorrússia, da Moldávia, da Estônia e outras regiões, haviam penetrado no Donbass, iniciaram o cerco a Leningrado e ameaçavam Moscou. O Exército Vermelho, sozinho, enfrentava o mais poderoso exército do mundo capitalista, o alemão, que fizera a França capitular em 18 dias, exército que contava com as reservas humanas e materiais de toda a Europa por ele ocupada. Inglaterra e Estados Unidos, apesar das conferências e promessas, só abririam a segunda frente –reclamada por Stalin desde os primeiros dias da guerra –quando o Exército Vermelho, após todas as privações, já havia imposto a Hitler derrotas estratégicas, como em Stalingrado, e quando já mudara de fato o curso da guerra.

Naquele ano de 1941 chegou-se a cogitar a possibilidade de não celebrar-se o aniversário da Revolução de Outubro. Mas Stalin, como chefe do partido e da revolução, manteve a consagrada tradição, apesar da ameaça da aviação alemã. Fez nos dias 6 e 7 dois célebres discursos: no dia 6, que é o que reproduzimos abaixo, no metrô de Moscou, e no dia 7, na Praça Vermelha, para tropas que marchavam diretamente para o front. Neles resplandece em toda sua imensidão a firmeza ideológica, a capacidade de analisar de modo realista os aspectos políticos e militares da situação, sua correlação de forças interna e externa, e o otimismo fundado na confiança nas massas soviéticas e nas tropas que combatem por uma causa justa.
Discurso Perante uma Assembléia do Soviet de Moscou e Representantes de Outras Organizações
J. V. Stálin (6 de Novembro de 1941)

Proferido na Qualidade de Presidente do Comitê de Defesa do Estado, na véspera do 24.º aniversário da Revolução de Outubro.

São decorridos, vinte e quatro anos, desde a vitória da Revolução Socialista de Outubro e da implantação do sistema soviético em nosso país. Estamos agora no começo de outro ano, o 25.° da existência do sistema soviético.

É comum, nas assembléias comemorativas da Revolução de Outubro, fazermos um resumo de nossos êxitos no domínio da construção pacífica durante o ano que passou. Esses êxitos nos domínios da construção pacífica aumentam, não somente de ano para ano, mas também de mês para mês. Quais são esses êxitos e qual a sua magnitude, sabem-no tanto nossos amigos como nossos inimigos.

O ano transcorrido não foi, porém, apenas um ano de construção pacífica. Foi também um ano de guerra contra os invasores alemães que atacaram, à traição, nosso pacífico país. Assim é que somente durante os seis primeiros meses do ano transcorrido pudemos continuar nossa construção pacífica. Durante a segunda metade do ano, mais de quatro meses foram empregados na encarniçada guerra contra os imperialistas alemães. A guerra transformou-se, assim, no ponto de rotação no desenvolvimento de nosso país durante o ano passado. Nossa construção pacífica reduziu-se consideravelmente e, em certos ramos, paralisou por completo. Fomos obrigados a reorganizar todo o nosso trabalho, colocando-o em pé de guerra. Nosso país transformou-se numa retaguarda unida a serviço de nosso Exército e de nossa Marinha. O período de construção pacífica chegou a seu fim. Começou o período de guerra, que visa libertar-nos da agressão alemã. 
É muito oportuno, pois, examinar os resultados da guerra durante a segunda metade do ano passado ou, para ser mais preciso, durante mais de quatro meses da segunda metade, focalizando as tarefas que tivemos de enfrentar nesta guerra de libertação.

Já vos disse em um de meus discursos no começo desta guerra, que a mesma criou um sério perigo para nosso país; que nossa pátria deve enfrentar esse perigo; que é necessário compreender e avaliar esse perigo, reorganizando todo o nosso trabalho de forma a colocá-lo em pé de guerra.

Agora, em consequência de quatro meses de guerra, devo frisar que esse perigo, longe de diminuir, aumentou ainda mais. O inimigo capturou grande parte da Ucrânia, da Bielorússia, da Moldávia, da Estônia e outras numerosas regiões; penetrou no Donbas, assedia Leningrado e ameaça Moscou, nossa gloriosa capital.

Os fascistas alemães estão saqueando nosso país, destruindo as cidades e aldeias construídas pelo trabalho de nossos operários, camponeses e intelectuais. As hordas de Hitler matam e violam os pacíficos habitantes de nosso país, sem a menor piedade para com as mulheres, crianças e velhos. Nossos irmãos das regiões capturadas gemem sob o jugo dos opressores alemães.

Os combatentes de nosso exército e de nossa marinha, defendendo a honra e a liberdade de nossa pátria, repelindo valentemente os ataques do inimigo brutal, estão dando exemplos de valor e heroísmo.

Mas o inimigo não se detém ante as suas perdas. Não lhe causa a mínima impressão o sangue de seus soldados, razão pela qual vai lançando à frente novos destacamentos em substituição a suas tropas postas fora de combate, concentra todas as suas torças para tentar a captura de Leningrado e de Moscou antes que chegue o inverno, pois sabe que este não lhe promete nada de bom. Durante esses quatro meses de guerra nossas perdas foram de 350.000 mortos, 378.000 desaparecidos e 1.020.000 feridos. No mesmo período o inimigo perdeu, entre mortos e feridos, 4.500.000 homens. Não há dúvida nenhuma de que a Alemanha, cujas reservas humanas já se estão esgotando, ficou mais debilitada que a União Soviética, cujas reservas somente agora estão entrando em ação.

Ao iniciar sua ofensiva contra o nosso país, os alemães calculavam que, seguramente, poderiam "acabar" com a URSS em um mês e meio ou dois meses, conseguindo, nesse breve tempo, chegar até os Urais.

É preciso notar que os alemães não faziam segredo desse plano de vitória relâmpago. Pelo contrário, proclamavam sua intenção por todos os meios. Os fatos, entretanto, encarregaram-se de demonstrar a superficialidade e a falta de base desse plano. Agora já se pode considerá-lo fracassado.

Como se pode explicar que a "guerra relâmpago" que tão bom resultado deu na Europa ocidental, tenha fracassado no Oriente? Quais eram os cálculos dos estrategistas nazistas, quando afirmavam que, em dois meses, acabariam com a União Soviética, chegando até os Urais em tão breve lapso de tempo? Baseavam-se, antes de tudo, no fato de que esperavam seriamente formar uma coalizão geral contra a URSS, atraindo os Estados Unidos e a Inglaterra, atemorizando os círculos dirigentes desses países com o fantasma da revolução e isolando, dessa forma, nosso país das demais potências.

Os alemães sabiam que a sua política de explorar as contradições existentes entre as classes dos Estados isolados e entre esses Estados e o país soviético, haviam já dado bons resultados na França, cujos governantes se deixaram atemorizar pelo espectro da revolução e, por medo, depuseram aos pés de Hitler a sua pátria, abandonando a resistência. Os estrategistas do nazismo pensavam que ocorreria o mesmo nos Estados Unidos e na Inglaterra.

O famigerado Hess foi enviado precisamente para isso à Inglaterra pelos fascistas alemães, com o objetivo de convencer aos políticos ingleses que deviam aderir à campanha comum contra a URSS Mas os alemães equivocaram-se lamentavelmente. A Grã-Bretanha e os Estados Unidos, em que pese aos esforços de Hess, não só não aderiram à campanha dos conquistadores fascistas, como ainda se colocaram ao lado da URSS, contra a Alemanha hitlerista. Dessa forma, a URSS não ficou isolada e, melhor ainda, adquiriu novos aliados na Grã-Bretanha, nos Estados Unidos e outros países ocupados pelos alemães.

Daí resultou que a política alemã de explorar as contradições e atemorizar com o espectro da revolução, passou de moda e já não serve à nova situação. E não somente não lhes serve de nada, como encerra graves perigos para os invasores alemães, pois, de acordo com as novas condições da guerra, a mesma política conduz a resultados diametralmente opostos.

Em segundo lugar, os alemães contavam com a inconsistência do regime soviético. Contavam com a inconsistência da retaguarda soviética, supondo que, após o primeiro golpe sério e os primeiros revezes sofridos pelo Exército Vermelho, surgiria um conflito entre os operários e os camponeses, começariam as lutas entre os povos da URSS. Mas, também nesse ponto, falharam as previsões alemãs. Os revezes do Exército Vermelho, não somente não debilitaram, mas reforçaram ainda mais, tanto a aliança entre os operários, como a fraternidade entre os povos da URSS. Mais ainda: converteram a família de povos que hoje constitui a URSS em uma só fortaleza que apóia abnegadamente seu Exército e sua Frota Vermelha.

A retaguarda soviética nunca foi tão sólida como agora. É perfeitamente certo que outro Estado qualquer, tendo perdido tanto território quanto nós, não resistiria à prova e se desaprumaria. Se o regime soviético resistiu tão facilmente a essas provas e reforçou ainda mais a sua retaguarda, isto quer dizer que o regime soviético é agora um regime mais sólido.

Os invasores fascistas contavam, finalmente, com a debilidade do Exército e da Marinha Vermelhos, supondo que poderiam, no primeiro golpe, destruir nosso exército e nossa frota, abrindo caminho assim para o seu avanço em direção ao interior de nosso solo. Mas ainda neste ponto os alemães falharam por haver superestimado as suas forças e subestimado nosso exército e nossa frota.

Naturalmente, nosso exército e nossa marinha são ainda jovens: estão combatendo há quatro meses apenas, não tiveram tempo de converter-se em um exército e marinha experimentados e estão se defrontando com exércitos que combatem há já dois anos. Mas, em primeiro lugar, o estado moral de nosso exército é superior ao do alemão, pois defende a sua pátria contra o invasor estrangeiro e acredita na justiça de sua causa; enquanto que o exército alemão faz uma guerra de rapinagem, assolando um país estrangeiro, sem que possa crer, por um minuto sequer, na justiça de sua causa abominável.

Não resta dúvida alguma de que a idéia da defesa de sua pátria, em cujo nome lutam nossos homens, deve engendrar e de fato engendra em nosso exército os heróis de que se compõe o Exército Vermelho; enquanto que a idéia da conquista e do saque, em cujo nome os alemães fazem a sua guerra, deve engendrar, como de fato engendra, um exército de salteadores profissionais, privados de todo o senso moral.

Em segundo lugar, ao avançar para o interior de nosso país, o exército alemão afasta-se de sua retaguarda, vê-se obrigado a lutar em uma atmosfera hostil, tem que organizar uma nova retaguarda em um país estranho, a qual é continuamente atacada por nossos guerrilheiros. Isso desorganiza radicalmente o aproveitamento do exército alemão, obriga-o a ter medo de sua própria retaguarda, matando nele a fé na solidez de sua situação; enquanto que nosso exército atua em ambiente próprio, goza da ajuda permanente de sua retaguarda, conta com um perfeito aprovisionamento em homens, víveres e materiais, tendo uma profunda fé na sua retaguarda. Eis aí porque nosso exército demonstrou ser mais forte do que pensavam os alemães e o exército alemão mostrou ser mais fraco do que se podia supor, a julgar pelas fanfarronadas dos invasores alemães.

A defesa de Leningrado e de Moscou, onde nossas tropas aniquilaram, não faz muito, três dezenas de divisões escolhidas alemãs, demonstra que, ao calor da guerra na defesa da pátria, forjam-se, como já se forjaram, novos soldados e chefes, aviadores, artilheiros, lança-minas, tanquistas, soldados de infantaria e marinheiros que amanhã se converterão numa tempestade para o exército alemão. Não há dúvida de que todas estas circunstâncias, tomadas em conjunto, predeterminaram a inevitabilidade do fracasso da "guerra relâmpago", no Oriente.

Tudo isto, naturalmente, é certo. Mas é verdade também que, ao lado dessas condições favoráveis ao Exército vermelho, há uma série de condições desfavoráveis que nos obrigam a ceder ante a pressão inimiga, a suportar revezes temporários, a retroceder, entregando ao inimigo uma série de regiões do nosso país. Quais são essas condições desfavoráveis? Em que residem os motivos dos revezes militares temporários do Exército Vermelho?

Um dos motivos consiste na falta de uma segunda frente na Europa, contra as tropas fascistas alemãs. Atualmente, no continente europeu, não há nenhum exército da Grã-Bretanha ou dos Estados Unidos que lute contra as tropas fascistas, de forma que Hitler seja obrigado a lutar em duas frentes: no oriente e no ocidente. Isso faz com que os alemães, considerando segura sua retaguarda no ocidente, possam lançar suas tropas e as de seus aliados na Europa, contra o nosso país. A situação é tal, que nosso país combate sozinho nesta guerra, sem ajuda militar de ninguém, contra as forças unidas alemãs, finlandesas, romenas, italianas e húngaras.

Os alemães se jactam de seus êxitos temporários e gabam desmesuradamente o seu exército, afirmando que este pode sempre vencer o Exército Vermelho. Mas as afirmações alemãs não são mais do que pura fanfarronice, pois não se compreende por que, se assim fosse, teriam os alemães de recorrer à ajuda dos finlandeses, romenos, italianos e húngaros, para lançá-los contra o Exército Vermelho, que luta exclusivamente com suas forças, sem qualquer ajuda militar de fora.

Sem dúvida alguma, a não existência de uma segunda frente na Europa, alivia consideravelmente a situação do exército alemão. Não há dúvida, pois, de que a criação de uma segunda frente no continente europeu — o que deve acontecer em futuro próximo — melhorará sensivelmente a situação de nosso exército, em prejuízo dos exércitos alemães.

Outra causa dos revezes temporários de nosso exército consiste na escassez de tanques e, em parte, de aviação. Na guerra moderna, é muito difícil para a infantaria lutar sem tanques, e sem uma suficiente proteção aérea. Nossa aviação é superior, em qualidade, à aviação alemã e nossos gloriosos aviadores estão se cobrindo de glória, da mesma forma que os combatentes de terra. Mas, por enquanto, temos menor número de aviões que os alemães.

Nossos tanques são de melhor qualidade que os dos alemães e nossos gloriosos tanquistas e artilheiros mais de uma vez puseram em fuga as tão gabadas tropas alemãs, com seus numerosos tanques. Mas a verdade é que temos varias vezes menos tanques que os alemães. Não podemos dizer que nossa indústria trabalha mal e fornece poucos tanques à frente. Não. Nossa indústria trabalha muito bem e fabrica grande número de tanques excelentes.

Os alemães, porém, fabricam muito mais, por isso que dispõem não só de sua própria indústria de tanques, como também da indústria da Tchecoslováquia, da Bélgica, da Holanda e da França. Não fora isso e o Exército Vermelho já teria derrotado o exército alemão, que não sabe lutar sem tanques e não resiste aos golpes de nossas unidades quando não contam com a superioridade nessas armas.

Existe apenas um meio necessário para reduzir a zero a superioridade dos alemães em tanques e, assim, melhorar radicalmente a situação de nosso exército. Esse meio consiste não só em aumentar varias vezes a produção de tanques em nosso país, como também aumentar rapidamente a produção de aviões anti-tanques, canhões e armas anti-tanques, morteiros e granadas anti-tanques, fazendo fossos anti-tanques e toda a espécie de obstáculos. É essa a nossa atual tarefa. Podemos cumpri-la e devemos cumpri-la, seja como for!

Quem são os nacional-socialistas, inimigos de nossa pátria? Em nosso país chamamos habitualmente os hitleristas, isto é, os invasores alemães, de fascistas. Os hitleristas, ao que parece, consideram que isto não é justo e insistem em denominar-se "nacional-socialistas". Por conseguinte, os alemães querem fazer-nos acreditar que o partido hitlerista, o partido dos invasores fascistas, que assola a Europa e organizou a canalha agressão ao nosso Estado socialista, é um partido socialista.

Será possível isso? Que pode haver de comum entre socialismo e os selvagens opressores hitleristas que saqueiam e oprimem os povos de toda a Europa? Pode-se considerar nacionalistas os hitleristas? Não é possível.

Na realidade, os hitleristas já não são nacionalistas, mas sim imperialistas. Enquanto os hitleristas procuravam unificar as terras alemãs com a anexação do Reno, da Áustria, etc., poderiam ser chamados nacionalistas com certo fundamento. Mas, depois que se apoderaram dos territórios alheios e escravizaram outras nações européias, submetendo ao seu jugo os tchecoslovacos, os polacos, os noruegueses, os holandeses, os belgas, os franceses, sérvios, gregos, ucranianos, bielorrussos, povos bálticos, etc., começando assim a lutar pelo domínio do mundo, o partido hitlerista deixou de ser nacionalista, pois desde esse momento converteu-se em invasor, opressor, quer dizer, imperialista. O partido hitlerista é, assim, o partido dos imperialistas, o partido dos imperialistas mais rapaces e salteadores de todo o mundo.

Pode-se considerar socialistas aos hitleristas? Não é possível. Na realidade, os hitleristas são inimigos jurados do socialismo, reacionários furiosos, que se parecem com os Cem Negros, que despojaram a classe operária e os povos da Europa das mais elementares liberdades democráticas.

Para ocultar sua essência reacionária, os hitleristas acusam o regime anglo-americano de regime plutocrático. Mas na Inglaterra e nos Estados Unidos há elementares liberdades democráticas, existem sindicatos de operários e empregados, existem partidos operários, existe um Parlamento; enquanto que, na Alemanha, o regime hitlerista aboliu todas essas instituições. É suficiente contrapor estes dois fatos para compreender toda a essência reacionária do regime hitlerista, toda a falsidade charlatanesca dos fascistas alemães a respeito do regime plutocrático anglo-americano.

No fundo, o regime hitlerista é uma cópia do regime reacionário que existia na Rússia sob o domínio tzarista. É sabido que os hitleristas arrebatam os direitos aos operários e aos intelectuais, tal como fazia o tzarismo; e que organiza também, com satisfação, as matanças de judeus, próprias da Idade Média, tal como o regime tzarista. O partido hitlerista é o partido inimigo das liberdades democráticas, o partido reacionário medieval, o partido dos pogroms, próprio dos Cem Negros. E quando esses imperialistas recalcitrantes e reacionários consumados se apresentam sob o rótulo de "nacionalistas" e "socialistas", fazem-no para enganar o povo, para idiotizar os cândidos e para encobrir sua essência imperialista. São gaviões disfarçados em pombas. Mas, por maior que seja o número de penas de pombas que ponha o gavião, este nunca deixará de ser gavião...

"É necessário, por todos os meios — escreve Hitler — conseguir para os alemães o domínio do mundo. Se quisermos criar o nosso grande império alemão, devemos, antes de tudo, eliminar os povos eslavos: russos, polacos, tchecos, eslovacos, búlgaros, ucranianos, bielorrussos. E não há motivo algum para que não o façamos".

"O homem — diz Hitler — é pecador inato: só pode ser conduzido pela força. Qualquer método é permitido para tratá-lo. É preciso mentir, atraiçoar e até matar, se a política assim o exige".

"Matai diz Goering — matai todo aquele que se manifestar contra nós. Matai, matai, que o único responsável sou eu. Por isso, matai".

"Eu quero emancipar o homem — diz Hitler — da humilhante quimera que se denomina consciência. A consciência, tal como a instrução, mutila o homem. Eu, por mim, não me detenho diante de nenhuma consideração de ordem morai ou teórica".

Numa ordem do comando alemão, dada ao 489.° regimento de infantaria, a 25 de Setembro, e que foi encontrada nos bolsos de um suboficial morto, lia-se o seguinte:

"Ordeno que façam fogo sobre qualquer russo que apareça a uma distância de 600 metros".

A Alemanha tem a insolência de pregar a destruição da Grande Rússia, a pátria de Plekhanov, Lênin, Byelinsky, Chernoshevsky, Puchkin, Tolstoy, Glynka, Chaikowsky, Gorky, Chekov, Sichenov, Pavlov, Retin, Surikov, Suvorov e Kutuzov. Os invasores alemães pretendem fazer uma guerra de extermínio contra os povos da União Soviética. Devemos fazer-lhes a vontade. De agora em diante, a tarefa de todos os povos da URSS, a tarefa dos combatentes e instrutores políticos de nosso exército e de nossa marinha, deverá consistir no extermínio, até o último homem, de todos os alemães que penetraram no território de nossa pátria como invasores. Não deverá haver piedade para os invasores germanos.

Somente os hitleristas, loucos e enfatuados, não conseguem compreender que a chamada "nova ordem" da Europa é um vulcão prestes a crepitar e cobrir com seus escombros o castelo de cartas de imperialismo fascista.

Os alemães acham que Hitler procede da mesma forma que Napoleão, mas não devem esquecer-se do que aconteceu a este. A verdade é que Hitler se parece tanto com Napoleão, como um gato com um leão. Napoleão lutou contra as forças reacionárias, apoiando-se nas forças progressistas; enquanto que Hitler, apoiado pelas forças reacionárias, faz a guerra contra as forças progressistas. Somente os hitleristas de Berlim não conseguem compreender que os povos subjugados da Europa lutarão e levantar-se-ão contra a opressão hitlerista. Quem pode duvidar de que a União Soviética, a Grã-Bretanha e os Estados Unidos darão seu mais amplo apoio aos povos da Europa em sua luta contra a tirania de Hitler?

Enquanto estiveram entregues à tarefa de unificar novamente a Alemanha, que havia sido cortada em pedaços pelo tratado de Versalhes, os hitleristas contaram com o apoio do povo alemão, animado pelo ideal de restaurar seu país; quando, porém, Hitler abandonou o caminho do idealismo e iniciou a anexação de terras estrangeiras, subjugando outros países, produziu-se uma profunda corrente de opinião contrária à prolongação desta guerra sangrenta, que já dura dois anos, e cujo fim não se vislumbra ainda.

Os milhões de vítimas humanas, a fome, a pobreza e as epidemias criaram, por toda parte, uma atmosfera de hostilidade contra á estúpida política de Hitler. Os hitleristas são os únicos que não se apercebem de que a retaguarda das tropas alemãs constitui um enorme vulcão, cuja erupção sepultará todos os aventureiros fascistas.

A Grã-Bretanha, os Estados Unidos e a União Soviética foram colocadas dentro do mesmo campo de ação e propuseram-se a derrotar os imperialistas nazistas e seus exércitos invasores.

A guerra moderna é uma guerra de máquinas e será ganha por aquele que conseguir uma esmagadora superioridade na produção das referidas máquinas. Se somarmos o que podem produzir os Estados Unidos, a Grã-Bretanha e a União Soviética, obteremos uma produção que será, pelo menos, três vezes maior que a da Alemanha. Esta é uma das razões fundamentais da sentença de morte que pesa sobre a rapacidade do imperialismo nazista.

Na conferência tripartite que recentemente se realizou em Moscou e da qual participaram lord Beaverbrook, como representante da Grã-Bretanha e Mr. Harriman, como representante dos Estados Unidos, ficou resolvido que seria prestada ajuda sistemática a nosso país, mediante o fornecimento de tanques e aviões. Como é sabido, já começamos a receber esses tanques e aviões, de acordo com o que ficou assentado na referida conferência. Mas já, antes desta, a Grã-Bretanha nos vinha fornecendo materiais de que necessitávamos, tais como alumínio, chumbo, estanho, níquel e borracha. Se, a isso, acrescentarmos o fato de que, há poucos dias, os Estados Unidos resolveram conceder ao governo soviético um empréstimo de um bilhão de dólares, podemos declarar com certeza que a coalizão entre os Estados Unidos, a Grã-Bretanha e a União Soviética é um fato cuja importância está aumentando cada vez mais, em benefício de nossa causa comum. São esses os fatores que determinarão a inevitável destruição do imperialismo nazista.

Lenine dividiu as guerras em duas classes: as guerras de agressão, que são injustas; e as de defesa, que são justas. Os alemães estão fazendo uma guerra de agressão que tem por objetivo a anexação de terras de outros países e, portanto, todo homem honesto deve levantar-se para esmagar as agressões.

Os povos da União Soviética e seus aliados estão fazendo uma guerra de libertação que visa restituir a liberdade aos povos subjugados da Europa, vítimas do imperialismo de Hitler. Toda pessoa honrada deve abastecer os exércitos de nosso país, da Grã-Bretanha e dos Estados Unidos, por se tratar de campeões da libertação, não somente na Europa, mas também na Ásia, como por exemplo no Irã.

Nosso primeiro dever é libertar os povos escravizados da Europa. Os povos subjugados de todo o mundo apelaram para nós, solicitando ajuda. Devemos fazer tudo quanto esteja em nosso poder para ajudá-los e para que voltem a viver em completa liberdade dentro de sua pátria, da maneira que desejarem. Para atingir esse fim, devemos destruir a máquina de guerra alemã, aniquilando a parte da mesma que penetrou em nosso país.

Por essa razão, é indispensável que nosso exército e nossa marinha tenham a força suficiente para fazer uma guerra eficiente. Para isso, nossos operários deverão trabalhar no sentido de produzir, cada vez mais e sem desfalecimentos, maior número de tanques, de canhões anti-tanques, aviões, artilharia, morteiros de trincheira, metralhadoras, fuzis e munições, enviando isso tudo rapidamente para a frente.

É igualmente necessário que os camponeses, homens e mulheres, trabalhem nos campos sem regatear seus esforços, provendo a frente e o resto do país com maior quantidade de cereais, carne e matérias primas para nossas indústrias. É necessário, alem disso, que todo o nosso país e todo o povo da União Soviética se organizem como se se tratasse de um só campo de combate e que, juntamente com nosso exército e nossa marinha, lancem uma grande guerra, para evitar que a honra e a liberdade de nossa pátria sejam destruídas pelo exército alemão. É esta a nossa tarefa, por enquanto. Somente, se cumprirmos essa tarefa e derrotarmos os invasores alemães, poderemos alcançar uma paz justa e duradoura.

Pela completa destruição dos invasores alemães!
Pela libertação de todos os povos oprimidos que gemem sob o jugo da tirania hitlerista!
Viva a indestrutível amizade de todos os povos da União Soviética!
Vivam o Exército e a Marinha Vermelhos!
Viva nossa pátria gloriosa!
Nossa causa é justa; a vitória será nossa!